VERÓNICA MULLOR VILANOVA. - v.m.v.

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Autoficha
Me llamo Verónica Mullor Vilanova y tengo 34 años. Nací en Sabadell pero vivo en Sant Lluís con mi pareja, con quien tengo un hijo en común. Soy abogada y trabajo en un despacho de Ciutadella varias veces a la semana. Lo que más me gusta hacer cuando tengo tiempo libre es viajar y ver a mis amigos.

¿Cuándo y por qué motivo llegó a Menorca?
Llegué hace cinco años por motivos laborales. Nunca había estado en la Isla y la verdad es que, sin conocer a nadie, me costó un poquito adaptarme porque, además, soy muy urbana. También pienso que el lugar lo hace la gente y, una vez que fui conociendo a diferentes personas, me hice un hueco y me fui sintiendo más de aquí. Posteriormente, la empresa en la que trabajaba cerró pero encontré a mi actual pareja y decidí quedarme.

Estudió Derecho, ¿por qué esa carrera?

Me parecía interesante aunque los primeros años no ejercí. A raíz de la situación laboral de los últimos años, que se ha puesto tan difícil, probé y volví al mundo del Derecho. Es un trabajo duro porque tratas con personas y sus problemas. Conlleva mucha responsabilidad porque de ti depende que las cosas salgan bien y a veces es complicado.

Trabaja como abogada en un despacho de Ciutadella varias veces a la semana pero, en realidad, su vocación es otra.Sí, la ilusión de mi vida siempre ha sido tener una empresa que se dedique a la creación de eventos.
Cuando llegué a Menorca, conocí a Paula y Ángela y, hablando un día sobre todo esto, decidimos poner en marcha el proyecto. Yo creo que la creación de eventos no tiene por qué ser siempre igual. La comunicación es muy importante y el mensaje se puede hacer llegar de muchas formas originales.

Menorca no está muy al día en esto de la creación de evento, ¿o sí?

Esta idea no está muy desarrollada en la Isla. Las empresas tienen que ser conscientes de que se pueden organizar eventos lanzando un mensaje de forma creativa y emocional. La verdad es que es un trabajo muy satisfactorio porque, además de hacer lo que realmente me gusta, me lo paso muy bien haciéndolo, sobre todo cuando ves los buenos resultados al final.

¿Qué es lo más extraño que han tenido que organizar?
Un grupo de personas de Barcelona nos dijo que quería venir un fin de semana de vacaciones y que se habían leído el libro "La isla de la los cinco faros". Nos lo tuvimos que leer y se nos ocurrió organizarles un fin de semana de juego, en el que iban encontrando mensajes. Fue, desde luego, algo fuera de lo normal.

¿Cuáles son sus próximos planes?
Me hace mucha ilusión irme de viaje con mi pareja a África. Hubo una temporada que fuimos bastante y me apetece volver. También quiero seguir formándome a nivel profesional, es algo que siempre enriquece.