Cas Sucrer. Los responsables consideran que sigue siendo viable - Archivo

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Pastisseria Es Mercadal S. L., más conocida como Cas Sucrer, ha presentado concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos) en el Juzgado de lo Mercantil de Palma. La empresa cuenta actualmente con diez empleados. De momento, continúan trabajando con normalidad en la planta de Ferreries y en la tienda de la Plaza de la Constitución en Es Mercadal, a la espera de que el juez admita la solicitud y nombre un administrador judicial. Esta histórica empresa fundada en 1873 "atraviesa puntuales problemas de tesorería" y sus responsables pretenden renegociar sus deudas convencidos de la viabilidad de esta histórica sociedad.

Plan de viabilidad
La petición de concurso de acreedores fue precedida el pasado verano por la presentación a sus proveedores financieros y no financieros de un plan de viabilidad (exigido por la ley concursal) para adecuar sus gastos a los ingresos actuales, seriamente mermados por la crisis económica. A fecha 1 de junio de 2010, la compañía Pastisseria Es Mercadal S. L., acumulaba una deuda con proveedores (no financieros) de 174.161 euros. Entonces propuso a sus clientes diversas modalidades de pago que incluían la quita o eliminación de entre el 20 y el 40 por ciento de la deuda y el abono del resto en diferentes pagos en cinco o tres años vista. Este plan no funcionó hace dos semanas, la sociedad presentó en el juzgado la solicitud de suspensión de pagos.

Cas Sucrer des Mercadal es una pastelería artesana de larga tradición familiar. Desde 1884 se ubica en la esquina de sa Plaça y actualmente es propiedad de Jaume Villalonga Villalonga, único maestro artesano honorífico de Balears en pastelería. Cas Sucrer es reconocido por sus especialidades en amargos, "carquinyols", tartas, brazos de gitano, turrones, caramelos y ensaimadas.