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Me llamo Víctor González Bayo y tengo 36 años. Nací en Arenys de Mar pero vivo en Sant Climent desde el 2008. Estoy casado y tengo dos hijos. Soy cocinero y disfruto elaborando platos con buenos productos. A la hora de comer, me encantan los huevos fritos con patatas y guisos de cazuela. También soy presidente de la APIMA Sa Furana. Cuando dispongo de tiempo libre me gusta cocinar, el deporte, ir al cine y cuidar de mis hijos.

¿Cuándo comenzó a sentirse atraído por la cocina?
Creo que desde pequeño porque mis padres se dedicaron mucho tiempo a la hostelería. A los 14 años, me fui a Vall d'Arán a estudiar para ser cocinero pero a los siete meses me dijeron que no servía. Era lo que yo quería hacer así que, inmediatamente, comencé de pinche de cocina, fui saltando hasta hoy, que tengo 24 años de experiencia.

¿Por qué se instaló en Menorca?
Vine en 2001 con los Geganters d'Arenys a las fiestas de Maó. Estuvimos una semana y me encantó la Isla. Me salió una oferta para trabajar en S'Algar. Estuve tres años. Después, volví a Barcelona hasta que surgió otra oferta de trabajo en Menorca. Entonces conocí a mi mujer, que es menorquina, y en 2008 me instalé aquí definitivamente.

¿Qué es lo que más le gusta de su profesión?
La pasión que se le pone a la cocina, algo fundamental en esta profesión. Eso sí, es muy esclavo y hay que echar muchas horas. Yo, además de cocinero, soy jefe de cocina, así que organizo a algunos trabajadores y eso a veces genera tensión. Me gusta elaborar cualquier plato siempre y cuando sea con buenos productos y eso no significa que tengan que ser caros. Me encanta limpiar el pescado para servirlo sin espina, y lo mismo disfruto con un bizcocho que con una carne.

¿Por qué cree que en España hay cada vez más obesos?
Lo que falta en este país es la cultura de comer natural y sano. Se tiende a lo rápido. En vez de comprar un filete de pescado, se coge el empanado para freír, cuando quizá lo que recubre a ese pescado sea lo malo. Habría que comprar más en mercados que en el supermercado, consumir más productos de proximidad.

Por otro lado, también es presidente de la Asociación de Padres y Madres de la Escuela Infantil de Sant Climent. ¿Qué objetivos se han mercado para este curso?
El colegio es pequeñito y tiene buenos profesores. Hemos organizado actividades extraescolares y organizamos espectáculos los fines de semana para que los niños puedan disfrutar de ellos. No podemos hacer mucho por como está la economía pero sí nos gustaría que los padres se comprometieran más y colaboraran. Lo último que hemos hecho es comprar carritos y botas para el pequeño huerto que tienen en el colegio.