El Consell recorta el gasto social y las inversiones

La Administración insular gestionará el próximo año 93 millones de euros, lo que representa un 5,5 por ciento menos que en 2010 y destinará a inversiones 40,9 millones, lo que se traduce igualmente en un descenso del 1,6 por ciento. El Consell reserva asimismo una partida de 24,5 millones para promoción y protección social, 4,6 millones menos que el año pasado."Son unos presupuestos austeros, más eficientes y más flexibles", resumió ayer el presidente del Consell, Marc Pons, durante la presentación de las cuentas insulares, acompañado por la consellera de Economía, Antònia Allès, y el conseller de Servicios Generales, Gabriel Subirats. En clave preelectoral y a tenor de los recortes, Pons recordó que se trata de los últimos presupuestos de la legislatura y abundó en la evolución al alza del esfuerzo inversor mantenido por el Consell en estos años, al pasar de los 17,8 millones de 2007 a los 40,9 previstos para próximo ejercicio.

Logros que fundamentó en los recursos que el equipo de gobierno ha sabido detraer de otras administraciones y en el incremento del 20 por ciento en los ingresos corrientes. "Hemos trabajado para hacer frente a la crisis favoreciendo la inversión pública con el objetivo de minimizar la paralización de la construcción, y hemos garantizado los servicios sociales consiguiendo las ratios más altas de Balears en plazas geriátricas y educación de 0 a 3 años" resaltó.

Cuentas marcadas

No obstante, el presidente admitió que las cuentas insulares del próximo año están muy marcadas por la imposibilidad del Consell de solicitar préstamos en cumplimiento de la Ley Presupuestaria, al superar su deuda el 75 por ciento de los ingresos (de los más de 40 millones actuales pasará a finales de 2011 de 37,2 millones según el equipo de gobierno). En los presupuestos también quedará reflejada la reducción de los ingresos del Estado vía IRPF en un 4,7 por ciento (los ingresos por IVA suben un 7,7 por ciento), la prórroga de los presupuestos de la Comunidad Autónoma y la aplicación del Plan de Austeridad del Consell (reducción de la estructura política en un 20 por ciento, del sueldo de los trabajadores en un 5 por ciento y de las partidas de comunicación y publicidad en un 15 por ciento). "Los presupuestos representan la solidez y capacidad del gobierno para conseguir recursos económicos de otras administraciones", subrayó Pons. Sin embargo, inconformista y posiblemente también en tono electoral, la consellera de Economía incidió en que la financiación exterior así como el traspaso de competencias hacia el Consell son aún insuficientes y destacó el trabajo, la responsabilidad y la transparencia de la institución insular a la hora de agilizar el pago de ayudas y subvenciones.

Ingresos y gastos

En este sentido, el conseller de Servicios Generales recordó que el 60 por ciento de los recursos insulares proceden del Govern y, a pesar de la crisis, las partidas procedentes de otras administraciones -que representan el 96,6 por ciento del presupuesto- se mantienen respecto a 2010 (+0,5 por ciento). Además, aún quedan por cerrar convenios específicos con el Ejecutivo autonómico. Los ingresos corrientes bajan en su conjunto un 0,6 por ciento y en total supondrán 54,8 millones de euros.

El gasto corriente se reduce un 5,3 por ciento y se mantiene en 46,6 millones de euros, el 50 por ciento de los 93,1 millones que gestionará el Consell. Las remuneraciones de personal representarán el 18 por ciento, (16,7 millones), "menos de una quinta parte del presupuesto", recalcó Subirats. Las subvenciones y ayudas también descienden un 5,8 por ciento, aunque el recorte es menor en Movilidad, Acción Social y Cultura (programas de educación de adultos y becas). Por departamentos, Movilidad, Servicios Generales y Trabajo, Acción Social y Presidencia son los que más recursos gestionarán en 2011. El presupuesto también tendrá vocación municipalista y destinará 12,3 millones a los ayuntamientos para que puedan acometer los proyectos que consideren prioritarios.