Beatriz Lapiedra: "Quería zanjar la multa antes de empezar"

El instructor del expediente, Guillem Bosch, esgrime que su compañera de grupo "hizo el pago de forma voluntaria" y que el expediente de disciplina urbanístico "se ha tramitado como el de cualquier otro ciudadano". Es cierto que la sanción está zanjada, pero en paralelo el Ayuntamiento deberá tramitar el expediente de restitución de la legalidad de los 50 metros construidos sin licencia en el chalé de Lapiedra y su marido. "El proceso para la demolición seguirá la tramitación administrativa normal", apunta Bosch.

De hecho, la barbacoa de Lapiedra es una obra ilegalizable, por lo que deberá afrontar la demolición. Podría darse el caso que la que será la responsable de otorgar las licencias de obra tuviera que firmar la demolición de su propia barbacoa, no obstante, ha sido designado como instructor del caso el concejal de Gobernación, Guillem Bosch. El expediente urbanístico abierto a Beatriz Lapiedra y su marido arranca en 2007, cuando el inspector municipal de Urbanismo constató la ejecución de unas obras sin la preceptiva licencia. El expediente se inició en 2009, en el mandato de Llorenç Brondo, y se ha acelerado en los últimos meses. De alguna manera la alcaldesa Pilar Carbonero quería resolver el caso antes de que la concejala tomara posesión de su cargo. La edil ha pagado la multa urbanística, pero queda la incógnita sobre la demolición de la barbacoa.

De hecho, la existencia de este expediente fue el motivo de las reticencias iniciales del PSOE a elegir a Lapiedra para cubrir la baja de Anna M. Pons, que dimitió el pasado día 14. Según fuentes consultadas, Lapiedra fue la opción de la alcaldesa. En los corrillos políticos se habla de "error político" de Pilar Carbonero, teniendo en cuenta que ha elegido a Lapiedra para ocupar la gerencia de las licencias de obra. A la vez, el expediente de disciplina urbanística a la concejala es una nueva espina en las relaciones entre el PSOE y el PSM, partido que a nivel interno considera una decisión de la alcaldesa poco ética y acertada.

PP y UPCM piden que Lapiedra no gestione las licencias de obra
El estallido del caso urbanístico que afecta a la nueva concejala de Urbanismo ha tenido su repercusión política. La portavoz del PP, Antònia Gener, considera que "realmente es poco ético que la persona que debe velar por el cumplimiento de la legalidad de las licencias de obra haya cometido obras ilegales e ilegalizables". La concejala popular opina que Pilar Carbonero "no ha acertado con esta decisión. Aunque haya querido acelerar el expediente sancionador y la multa esté pagada, creemos que Beatriz Lapiedra no es la persona más adecuada para gestionar el área de los permisos de obra en Urbanismo".
Gener opina que "la alcaldesa debería abordar una remodelación de las áreas de gobierno, es un caso poco ético y que no da ejemplo a los ciudadanos". Por su parte, el portavoz de UPCM, Joan Triay, asegura que el expediente que afecta a Beatriz Lapiedra "ha sido una sorpresa, nos hemos enterado por la prensa". Afirma que "creemos que Pilar Carbonero, que sabía del caso, se tendría que haber replanteado la designación de la edil, aunque no nos metemos en una decisión que corresponde a otro partido". Triay arguye que "creemos que ha sido un error político de bulto de la alcaldesa, que conociendo estas circunstancias no tendría que haber situado a Lapiedra en Urbanismo". Desde UPCM apuntan que "lo más indicado sería, como mínimo, un cambio de área, aunque es una decisión de otro partido que no nos corresponde tomar a nosotros".