INSTALACIONES. El grupo Nueva Rumasa se hizo con las riendas de la antigua fábrica de El Caserío en junio de 2009 - Archivo

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Ante los problemas surgidos a raíz de la entrega de pagarés como instrumento de pago, Quesería Menorquina negociará de nuevo con las explotaciones que proveen de cuajada a la fábrica la forma de retribución más adecuada para ambas partes. Así lo indicó ayer el director general de Quesería Menorquina, Fernando Rodríguez, quien achacó a una falta de entendimiento entre la empresa y sus proveedores el hecho de que los propietarios de las fincas no hayan cobrado todavía los pagarés a través de los cuales se les abonaban los meses de agosto y septiembre.

Rodríguez se mostró sorprendido ante la información publicada ayer por este diario y aseguró no tener conocimiento de las dificultades de las explotaciones para hacer efectivos los pagarés. "No hemos recibido ninguna queja por parte de los propietarios de las fincas ni teníamos constancia de que los documentos no hubieran sido cobrados", aseguró. En este sentido, indicó que ayer mismo se iniciaron los contactos con los afectados para conocer la situación y aclarar las causas de este "malentendido".

Por otro lado, desmintió que la facturación de mayo, junio y julio fuera abonada a las fincas el pasado mes de agosto. "Siempre hemos pagado todas las mensualidades", recalcó.

Acuerdo
El director general de la empresa quesera hizo referencia al acuerdo alcanzado el pasado mes de agosto con las explotaciones para modificar la fórmula de retribución a los proveedores de cuajada con el objetivo de evitar demoras en los pagos, que anteriormente se realizaban a través de una transferencia bancaria mensual. Asimismo, puntualizó que en todo momento se puso sobre la mesa que los costes financieros en el caso de cobrar el pagaré por anticipado correrían a cargo de Quesería Menorquina.

"Nuestro objetivo era que los proveedores tuvieran liquidez inmediata y sin ningún coste añadido", matizó Rodríguez, quien defendió que los pagarés son un método financiero "más preciso" y favorable tanto para las fincas como para la empresa. "Asumiendo el coste financiero disponemos de más tesorería y las explotaciones no sufren en ningún sentido porque en el momento que se les entrega el documento disponen de la liquidez que necesitan para sus gastos sin ningún sobrecoste", explicó.

Así las cosas, el director general apuntó que en el caso de que los propietarios de las fincas estén de acuerdo, se mantendrá la fórmula de pago mediante pagarés, "en el caso contrario, habrá que replantearse la situación".

Los trabajadores de la fábrica denuncian retrasos en el cobro de las nóminas
Los trabajadores de Quesería Menorquina se han sumado a las quejas de las explotaciones y también han denunciado retrasos en el cobro de las nóminas, que se han acentuado en los últimos seis meses. La delegada sindical de la empresa, Margot Sastre, confirmó ayer que se han producido demoras en el pago de algunas mensualidades aunque hizo un llamamiento a la tranquilidad. "Estamos a la expectativa pero no debemos precipitarnos", declaró.

Sastre concretó que los atrasos han afectado a las nóminas de mayo y de octubre, mientras que el resto de meses "hemos cobrado con puntualidad británica". No obstante, la delegada sindical puntualizó que, aunque hasta el momento los retrasos eran de "cinco o seis días como máximo", los trabajadores tan sólo habían recibido a día de ayer el 50 por ciento de su sueldo del mes pasado. Asimismo, indicó que la paga extraordinaria del pasado mes de julio se cobró con 15 días de retraso. Pese a todo, Sastre remarcó que la empresa siempre ha avisado con antelación de las demoras en el pago de las nóminas y recalcó que existe una "buena comunicación" entre el Comité de Empresa y Quesería Menorquina. Por su parte, Rodríguez reconoció que en alguna ocasión se han hecho efectivas las nóminas con algunos días de retraso pero en todo momento se les ha comunicado anticipadamente. "El crédito a las empresas está bastante restringido y, por tanto, nos vemos obligados a adecuar el calendario de cobros al de pagos", señaló el director general. "Eso no quiere decir que los trabajadores no vayan a cobrar ni que no se estén buscando fórmulas para que cobren cuando deben cobrar", indicó.