Ocibar concluirá en los próximos días las obras de reordenación y mejora de Cala Llonga iniciadas al principio del verano. La concesionaria de "s'altra banda" ya ha habilitado una parte de los pantalanes flotantes de la ribera norte del puerto incrementando en una treinta los puntos de atraque existentes en Cala Llonga hasta sumar en la actualidad un total de 130 amarres.
La máquina excavadora que ayer continuaba abriendo zanjas junto a la orilla del embarcadero, para completar las acometidas de luz y agua a los pantalanes, finalizará sus trabajos hoy mismo, según informaron fuentes de Ocibar. Precisamente, hace varios días algunos residentes de esta urbanización expresaron sus quejas por el molesto ruido ocasionado por una máquina hidráulica mientras picaba el suelo para canalizar las acometidas y de agua y luz. El insistente martilleo se mezclaba también con el ruido procedente de otras máquinas que pulían los pantalanes, circunstancia que irritó a varios turistas que habían alquilado durante unos días un chalé cercano a las obras.
Torretas de suministro
Estos trabajos están prácticamente concluidos según la concesionaria y tan sólo queda por desencofrar el acceso a uno de los pantalanes. La instalación de las torretas de electricidad y suministro de agua para prestar servicios a los amarristas también ha concluido.
Illa del Rei y Pilar Alonso
En cuanto a los 48 amarres que la concesionaria gestiona igualmente en la Illa del Rei y que también han sido objeto de mejora, ya cuentan con las cadenas para facilitar el amarre de las embarcaciones. Por otra parte, en las inmediaciones del muelle de Pilar Alonso, junto a Cala Rata, Ocibar acaba de concluir igualmente la instalación de los pilotes del nuevo pantalán que dará servicio a esta zona y que dispondrá de una docena de amarres. Los nuevos puntos de atraque estarán operativos en dos semanas, según señalaron las mismas fuentes de la marina.
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