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Me llamo Martín Llanes Macazaga y tengo 32 años. Nací en Montevideo (Uruguay), pero vivo en Menorca desde hace seis años. Soy sociólogo, aunque me dedico a realizar trabajos verticales en el sector de la construcción. Soy secretario de la Asociación de Uruguayos en Menorca Ramón Mataojo, me gusta implicarme en temas relacionados con la inmigración. Mis aficiones son la música, tocar la guitarra, el deporte y la lectura.

¿Cuál fue el motivo de su llegada a Menorca?
Vine a Menorca por un amigo. Estando en Uruguay, yo quería viajar a España a trabajar una temporada. Mi amigo venía a la Isla y vine con él. Me encantó desde el primer momento, sobre todo su naturaleza. Regresé la siguiente temporada hasta que en 2007 decidí instalarme.

¿Cómo surgió la idea de crear la asociación?
Fue hace un año y pico. Yo solía ayudar a bastante gente en temas relacionados con su llegada a la Isla, así que pensé en formar una asociación para uruguayos y ayudar a aquellos que estén desorientados en cuestión de trámites de papeleo, en la cuestión cultural y en todo lo relacionado con la integración. Actualmente, en la asociación trabajamos unas nueve personas de forma activa y contamos con treinta socios.

¿Se puede decir que en Menorca hay una gran comunidad uruguaya?
Es difícil saberlo. Hay unos 370 empadronados, pero hay que tener en cuenta que hay gente que se ha ido, así que es bastante relativo. Lo que sí sabemos es que, en general, los uruguayos que llegan a Menorca son personas con formación, pero que han terminado trabajando en el sector servicios. Hay muchos en hostelería, pero también trabajando como taxistas.

¿Qué hay de los proyectos que tiene en marcha la asociación?
Nosotros vamos organizando cosas poco a poco. El 12 de junio traeremos a dos músicos muy conocidos en mi país, Edú "Pitufo" Lombardo y "Pinocho" Routín, ambos figuras del Carnaval uruguayo. También organizamos un ciclo de cine de Uruguay, visitas con la cónsul, los campeonatos de truco o el taller de candombe. La idea es no tratar de crear gueto, sino abrir toda esa faceta cultural, al igual que estamos abiertos a lo menorquín. Vamos a todas las reuniones y todo lugar donde nos llamen.

¿Cómo está afectando la crisis a la comunidad uruguaya?
Es una situación complicada para todos, pero hay que decir que existe una imagen negativa del inmigrante. Hoy por hoy, los más damnificados son los inmigrantes, sobre todo la población magrebí. Si no fuese por la inmigración, no hubiera habido un crecimiento económico tan grande en España. Los inmigrantes no son sólo mano de obra ni material desechable.

¿Le gustaría quedarse en Menorca o volver a Uruguay?
Sé que mi lugar está ahí. Vine cuando quise y regresaré cuando quiera. Menorca ha sido una gran experiencia. Es como un pequeño planeta con gente de todos los lugares del mundo. Para sus dimensiones, es espectacular.