El temor de que pueda calar el mensaje de que el Plan Territorial Insular impide la puesta en marcha de determinadas iniciativas en Menorca, a raíz de informaciones como la del proyecto frustrado de Torralbenc Vell, ha animado al presidente del Consell, Marc Pons, a romper una lanza en favor del documento que regula la ordenación territorial insular.
"Queremos salir en defensa del modelo de territorio de Menorca y del PTI que es una herramienta muy buena para conjugar el crecimiento económico y la protección del territorio", aseveró Pons. En este sentido, el presidente recordó que "en todos los 'llocs' independientemente del grado de protección del suelo, las edificaciones pueden convertirse en agroturismo u hoteles rurales, estando permitida la construcción de bodegas".
El responsable del equipo de gobierno añadió que la ejecución de este tipo de proyectos viene condicionada, en cualquier caso, al cumplimiento de la normativa vigente, quedando desvinculada su autorización de la voluntad política. "Que se conceda o no autorización a un proyecto queda ligado al cumplimiento de la normativa; no es cuestión de voluntad política. Hay un procedimiento reglado y si cumplen todos los requisitos se obtiene la autorización", insistió Pons.
Desde el equipo de gobierno se pretende atajar "la sensación, percepción o preocupación generada" por el caso de Torralbenc Vell, un proyecto que no ha sido visto por el Consell, según Pons. "Puede ser que el arquitecto presentara una maqueta, pero aquí funcionamos de manera reglada y el Consell no ha tenido acceso a estudiar el proyecto porque formalmente no se presentó", argumentó el responsable de la institución insular.
Tramitación
Pons, quien no quiso profundizar en el caso concreto, evitando referirse a las trabas y al trato recibido en el Consell a las que aludió el arquitecto del proyecto, manifestó la voluntad de la institución insular de apoyar todas las iniciativas de los ciudadanos, contribuyendo a que éstos puedan tramitarlos con el máximo apoyo posible.
"Tramitaremos los expedientes y los proyectos en base al cumplimiento de la normativa y de manera reglada como lo hemos hecho siempre", remachó el presidente.
Pons no ocultó su malestar porque se haya podido transmitir que la administración insular haya tenido una respuesta lenta en una iniciativa en la que no han actuado, más allá de lo relativo a la plantación de la viña, en lo que colaboraron con el promotor.
"No me parece justo", se lamentó Pons antes de repetir, a modo de conclusión, que la preservación del paisaje que persigue el PTI es "una herramienta básica para la generación de riqueza a largo plazo", motivo por el que, dando cumplimiento a los condicionantes que establece el propio plan territorial, están permitidas en suelo rústico, tanto general como de especial protección, un amplio abanico de actividades complementarias a la explotación agropecuaria, según explica.
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