Mi nombre es Rosana Samaniego Hernández y tengo 25 años. Nací en Ávila, pero vivo en Maó desde hace un año y medio. Trabajo en una peluquería como esteticién y maquilladora. Mis aficiones son el baile, el patinaje, la playa y todo aquello que me permita relajarme.
¿Por qué motivo llegó a Menorca?
Llegué hace un año y medio porque a mi novio lo destinaron aquí. Anteriormente estábamos en Las Palmas. Había estado en Mallorca y en Eivissa, pero Menorca no la conocía. Se vive bien, pero creo que falta ocio y mejor comunicación con la Península, entre otros aspectos, pero si puedes viajar de vez en cuando, es buen lugar para vivir.
¿A qué se dedicaba antes de llegar a la Isla?
Llevo siete años dedicándome a la estética. Me encanta el maquillaje y los tratamientos faciales y corporales.
¿Por qué se le da tanta importancia al maquillaje en los medios de comunicación?
El maquillaje puede cambiar a una persona al cien por cien y se le puede sacar todo el partido. Básicamente, sirve para realzar la belleza de uno, disimular imperfecciones. A mí en particular me gusta el maquillaje natural, que no parezca que se lleva una máscara. En televisión y en fotografía, el maquillaje es muy importante. Y ya no es sólo cosa de mujeres, también se aplica a los hombres.
¿Qué maquillaje es el que más demandan los hombres?
Sobre todo acuden novios que van a casarse y se van a hacer las fotos. Quieren que no se vean brillos e imperfecciones, como granos o cicatrices. Hay muchos hombres que quieren maquillarse, pero con un tipo de maquillaje diferente.
¿Le ha ocurrido alguna anécdota en su trabajo?
Hubo una novia a la que le hice una prueba de maquillaje para su boda y, en principio, le gustó. Pero finalmente me dijo que quería cambiar de idea y que tenía otro look en mente. La maquillé mientras ella me iba explicando lo que quería y una vez que acabé, parecía una 'drag-queen'. Ella estaba encantada.
¿Qué le gustaría hacer en un futuro?
Me encantaría poder ser maquilladora de televisión, se hacen cosas increíbles. Me gusta mucho todo lo relacionado con el trabajo detrás de las cámaras.
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