El pasado 31 de julio, el escritor neerlandés Cees Nooteboom cumplió 91 años en su casa menorquina de Sant Lluís, donde desde hace casi sesenta años reside largas temporadas, especialmente entre los meses de junio y octubre. En esta casa tradicional menorquina, perdida al final de un camino en el caserío de Es Consell, ha escrito en su lengua materna numerosos libros de viajes, poesía, ensayo y novelas que después se han esparcido por el mundo traducidos principalmente al alemán, castellano, francés, inglés, italiano e, incluso, chino.
A los 18 años, Cees Nooteboom dejó el domicilio familiar y empezó a recorrer diferentes países, entre ellos España, del que se enamoró profundamente y ha recorrido toda su geografía de norte a sur y de este a oeste, plasmando sus vivencias y experiencias en sus exquisitos y documentados artículos publicados en dos periódicos neerlandeses en los años cincuenta, sin dejar de lado su emblemático libro «El desvío a Santiago».
Después de la obligada visita a Eivissa a principios de los años sesenta, isla que no le agradó por la gran presencia de turistas, Nooteboom descubrió Menorca y el flechazo fue instantáneo. «La primera vez que vine a Menorca fue en 1963, estuve en casa de un sobrino mío en Es Castell, que ya ha fallecido. La Isla me gustó tanto que compré una casa a las afueras de Sant Lluís y desde 1965 he venido cada año en verano para recorrer los rincones de la Isla y escribir mis libros, excepto el año de la pandemia de la covid-19», recuerda.
A partir de 1980, Nooteboom viajó a la Isla acompañado de su esposa la fotógrafa Simone Sassen, que desde entonces ha sido la autora de las imágenes que ilustran numerosos libros del escritor neerlandés. «Mi primer año en Menorca fue en 1980, yo tenía 28 años, ya han pasado 44 años. Nos conocimos en Amsterdam, yo trabajaba en un museo del siglo XVII, era la responsable junto con otra persona», señala Sassen. Desde entonces, libros como «Tumbas de poetas y pensadores» del mundo y «Saigoku» con los bellísimos templos de Japón son, entre otros muchos, buena muestra de la mirada fotográfica de Sassen.
Refugio
Durante seis décadas, Menorca ha sido el refugio de Nooteboom para aislarse del mundo que ha recorrido durante el resto del año y poder gozar de la tranquilidad y concentración imprescindibles para escribir. Libros como «En las montañas de Holanda», «La historia siguiente», «El día de todas las almas», «Perdido el paraíso», «El enigma de la luz», «Lluvia roja», «Cartas a Poseidón», «Autorretrato de otro», «El Bosco», «533 días» y «Venecia. El león, la ciudad y el agua» , entre otros, están impregnados del clima mediterráneo y el carácter menorquín del a poc a poc de quien ha querido conscientemente desde el primer día integrarse en la Isla y ser, a la vez, universal.
Cees Nooteboom y Simone Sassen, que agotan las últimas semanas de su estancia en la Isla por este año, confían en que Menorca siga siendo un paraíso durante muchos años más. «Menorca ha cambiado mucho desde que llegamos a la Isla, pero todavía mantiene su encanto. Debe impedirse que se construya de forma salvaje, creemos que la mayoría de los menorquines opina como nosotros. El turista no quiere hoteles ni masificación», subrayan.
El apunte
Ya no escribe aunque se siguen publicando ediciones en España de algunas de sus obras
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Menorca - Es diari
De momento no hay comentarios.