«Una noche fantástica», en palabras de Miquel Pascual, uno de los fundadores de la veterana formación musical, toda una institución del panorama artístico menorquín. Era una ocasión señalada y el público no se olvidó de la cita. Se vendieron el millar de entradas puestas a la venta (a 3 euros), unos fondos que irán a parar a Aspanob. Sonaron más de medio centenar de canciones entre las cien que más o menos tiene en su repertorio. Y algunas, como «Amores», un tema de Quinta Reserva y canción insignia de la banda, se tuvieron que interpretar dos veces por petición popular.
Durante el descanso hubo un momento para la nostalgia, con la proyección de imágenes de las diferentes etapas de la orquesta. También se grabó para la posteridad el concierto con un equipo de cuatro cámaras y se registró el sonido. «Lo queríamos como recuerdo», confiesa Pascual, quien ya piensa en su próxima actuación, la que ofrecerán este jueves en Fornells. La agenda de la orquesta está apretada para este verano, pero ya dejan caer que después de cuatro décadas en acción todo a punta a que el año que viene «todo será distinto», concluye Pascual.
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Enhorabuena