La ternura surrealista de Leonmanso

Se trata de un disco laberíntico que refleja el particular universo de Leonmanso, con un amalgama de estilos musicales, sensaciones, historias, personajes, sentimientos,… que no va a dejar a nadie indiferente.

El disco está marcado por la ternura que Leonmanso es capaz de transmitir a través de sus poesías musicadas que expresa su mundo, y en el que no faltan muchos tintes surrealistas, compaginados con historias cotidianas y numerosos detalles autobiográficos.

Alterna canciones animadas y alegres como 'Com tronc corrent avall', con algunas de más meláncolicas como 'Sa cançoneta' o 'Seny', otras de más familiares 'Sa mama cuida ses flors', algunas de reflexión más poética como 'Sa cara' y otras de difícil definición como 'Es darrer intent'.

Mezcla estilos diversos, hasta complementarlos. Desde el toque folk ('Es tren'), pasando por el pop-rock, el grunge, e incluso algún pinito con el rock psicolédico ('Es vell malalt) y algún toque tradicional menorquín ('Joan fandango').

Es el segundo disco de Leonmanso, tras 'Rinosaure' (Blau-Discmedi, 2010). 'Jardins de brutes basses' consta de 13 canciones y dura 54 minutos.

Leonmanso para grabar este disco ha contado con la colaboración de músicos, la mayoría de Ciutadella y amigos de toda la vida, como el propio Quim Torres (que además, como reponsable de Velomar Records, se ha encargado de grabar el disco), Martí Genestar, Aitor Arriarán, Lluís Gener, Guiem Soldevila, Len Mesquida y Joan Torres.

Para promocionar el disco, Leonmanso ha editado un vídeo musical (grabado por Macià Florit) en el que se puede ver al cantautor pedaleando un velomar en una playa, con fragmentos de todas las canciones del disco.