Si las nubes lo permiten, el cielo menorquín es algo de lo que se puede disfrutar durante todo el año, pero de forma especial en verano y más concretamente en agosto, con las conocidas lágrimas de San Lorenzo o perseidas.
Cap d’en Font, Son Catlar, Torre d’en Galmés o el aparcamiento de Son Saura (sur) son algunos de los miradores más destacados de la Isla. Contemplar el firmamento es algo que se puede hacer sin un guía, pero también existen empresas especializadas que organizan observaciones nocturnas.
Por otra parte, cabe señalar que Ciutadella cuenta con un observatorio astronómico que puntualmente organiza actividades.
Zonificación de la Reserva Starlight
En el ámbito de la Reserva Starlight, se considera zona núcleo aquella en que las condiciones de iluminación natural del cielo nocturno se mantienen prácticamente intactas. Se trata de una zona caracterizada por el mínimo efecto de la luz artificial en el medioambiente, llamada también zona oscura, donde se garantizan las funciones básicas de la Reserva: la observación astronómica, la función educativa, la cultural y de protección de la naturaleza.
Las zonas de amortiguamiento constituyen el ámbito de protección que envuelve la zona núcleo, donde los sistemas de iluminación artificial presentes tienen que diseñarse para evitar la contaminación atmosférica que pueda afectar directa o indirectamente la calidad del cielo nocturno en la zona núcleo.
La zona externa constituye el ámbito de uso general donde se encuentran los asentamientos poblacionales, donde se desarrollan las principales actividades que hacen un uso más intensivo de la iluminación artificial. Se persigue la aplicación de medidas para minimizar la contaminación lumínica, contribuir al ahorro energético y respetar los valores inherentes a la Reserva Starlight.
MAPA | Zonas de la Reserva Starlight de Menorca