En esta nueva edición del Anuario, a la hora de abordar la evolución de las empresas en Balears en el ejercicio 2023, hay que tener en cuenta un aspecto muy relevante a la hora de analizar este ejercicio 2023. Y es que venimos de un ejercicio 2022 donde el crecimiento del PIB superó todas las expectativas. Y hay que recordar y reconocer, que hubo un efecto rebote evidente. Las cifras del ejercicio 2022 fueron meritorias, pero son consecuencia o resultado de un efecto rebote derivado por la enorme caída del PIB en 2020 a consecuencia de los efectos de la pandemia. No debemos olvidar que en 2021 (y también en 2022) la apertura del turismo no fue total, sino que dependió, en buena medida, de la buena coordinación pública-privada y del potente posicionamiento de nuestras islas en el mercado internacional. La recuperación turística en Balears en 2021 y 2022 fue muy superior que la del resto de destinos turísticos españoles y europeos. Por tanto, está claro que hubo un efecto rebote, pero también un efecto diferencial positivo en la capacitación de flujos turísticos que se acabó traduciendo en unas cifras de reactivación más altas de las esperadas inicialmente. Por lo tanto, a la hora de analizar el ejercicio 2023 hay que ponerse en este contexto. En el ejercicio 2023, la economía de Balears ha cerrado con un crecimiento del 3,8%, por encima de la media nacional, empujada por el sector turístico que ha tenido una temporada alta con volúmenes de actividad récord y que se ha prolongado hasta casi finales de noviembre. Por lo tanto, la economía y las empresas en Baleares se han recuperado de los dos años fatídicos, pero lógicamente a un ritmo menos dinámico en 2023 respecto 2022.

La economía se desacelera, no se puede hablar de recesión y menos de recesión técnica, porque los números evidencian de que no hay recesión, pero si desaceleración. Y en parte es porque las empresas de Balears en este mundo global no son ajenas al mismo. La economía en la Eurozona está estancada, los tipos de interés a pesar de los anuncios de reducción no se están reduciendo, aunque si frenando su escalada y todo ello porque la inflación no se está reduciendo lo esperado. Todo esto lo han vivido las empresas de Balears este 2023. Unos costes financieros y no financieros aún altos siguen penalizando los márgenes de contribución, los cuales aguantan porque las cifras de facturación aumentan. Tenemos un sector turístico muy potente que ejerce de efecto arrastre en positivo al resto de sectores (distribución, inmobiliario, construcción …), todos se benefician de esta demanda externa que tiene a la oferta empresarial balear como un referente en calidad y buen hacer.

El sector turístico y su efecto arrastre al resto de sectores y empresas, ha conseguido en este ejercicio 2023 tener claro que el camino está en la reinvención. Por un lado, la innovación y la digitalización han sido claves en este proceso, permitiendo a las empresas expandir su alcance de negocio y encontrar nuevas vías de ingresos. La digitalización, más que una opción, se ha convertido en una necesidad urgente para la supervivencia y el crecimiento empresarial en Baleares. El comercio electrónico, la gestión en línea de servicios y la digitalización de las experiencias turísticas han cobrado impulso, mostrando el camino hacia una transformación digital integral. Por otro lado, la sostenibilidad. Muchas empresas han entendido la necesidad en este 2023 de transformarse en lo sostenible también, no solo para mejorar su eficiencia operativa sino también para responder a las demandas de un consumidor cada vez más en línea y consciente del medio ambiente.

En términos de empleo, las Islas Balears cierran el ejercicio 2023 con cifras históricas de afiliación y caída del paro. Esto explica también que el buen funcionamiento y los resultados de las empresas no solo dependan de la demanda externa, sino de que la demanda interna está ayudando. Hay trabajo y los salarios han mejorado. En parte, porque las necesidades urgentes, y en casos dramáticas, de mano de obra, han hecho que la retención solo se logre con incrementos salariales.

Así entonces, la evidencia objetiva nos muestra que hemos superado satisfactoriamente la crisis económica más fuerte de la historia reciente y que el horizonte más inmediato es positivo, con creación de riqueza por cápita y de puestos de trabajo de más calidad, si bien, es cierto, estamos inmersos en un estado de incertidumbre continuo y la necesidad de garantizar que no haya parte de la sociedad que se quede sin recibir ni percibir su parte en este reparto de esta riqueza generada por toda las empresas y la sociedad. Toda esta reflexión este hecho en un contexto en que el entorno geopolítico no se complique aún más en el futuro inmediato (Rusia con un Putin reforzado, elecciones en USA con Trump envalentonado y con posibilidades, China que va ganando terreno y una Europa como hemos dicho antes tocada económicamente). ¿Nos puede complicar a las empresas en Balears? Pues es evidente que no ayuda, todo lo que vaya en contra de la confianza no ayuda a ninguna empresa ni a ninguna economía.

Esta situación en general positiva no debe llevarnos a la autocomplacencia. Al contrario, debe ser un acicate para volver a afrontar el debate en el entorno de los retos estructurales y de largo plazo de nuestras empresas y de la economía en general de nuestras Islas. ¿Cuáles son los retos? A mi entender son; uno, la productividad, estamos lejos de otras regiones como el estudio de la Fundación Impulsa ha demostrado. Dos, tener un capital humano, con formación adecuada y estable. Tres, conseguir un sector público menos burocrático y mas facilitador y dinamizador.l