El paratriatleta menorquín, el día en que oficializó su presencia en sus primeros Juegos Paralímpicos.

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La montaña rusa con la que ha tenido que lidiar el paratriatleta de Maó, Nil Riudavets, desde que aquel fatídico 1 de mayo de 2019 sufriera un choque frontal a gran velocidad en el Prat del Llobregat y del cual su lesión más grave fuera la del plexo –que le dejaría la parálisis permanente en el brazo–, llegará estos próximos días a su punto más alto, ya que el mahonés debutará en sus primeros Juegos Paralímpicos. Será en París, en la modalidad de paratriatlón. Finalizadas unas exigentes semanas en la Cerdanya en las que el menorquín ha intensificado su puesta a punto para la cita de su vida, Riudavets se encuentra desde hace unas horas en la capital de España, donde en Madrid –en la Blume–, agilizará su preparación paralímpica, antes de viajar ya este próximo sábado día 24 de agosto a París.

«Después de meterme mucha caña en la Cerdanya» –como el mismo Riudavets nos explicaba ayer mismo a «Es Diari»–, el menorquín prepara las maletas para viajar a la capital francesa. El paratriatleta del Equipo CaixaBank de Promesas Paralímpicas de Triatlón viajará con la expedición de España, formada por 150 deportistas, 139 de ellos con discapacidad más once de apoyo, que competirán entre el 29 de agosto y el 8 de septiembre en 16 de las 22 modalidades del programa.

«La verdad es que tengo muy buenas sensaciones, estoy entrenando realmente bien y disfrutando mucho de la experiencia de poder entrenar en estas condiciones», señalaba de camino a Madrid y para este diario, el paratriatleta de Maó.    Y es que cuando quedan ya días para que el insular cumpla con su gran sueño de competir en unos Juegos Paralímpicos, abunda en que su gran objetivo será, «disfrutar de estar en París y el día de la competición darlo todo. En cuanto a opciones, creo que puedo estar luchando para rascar una medalla ahí pero está muy complicado, hay mucho nivel», avisa Riudavets, destacando principalmente como grandes adversarios a «tres franceses muy buenos, junto a un británico, un croata, un australiano y un americano, que están a un gran nivel. Se tratará de ver dónde puedo estar en el circuito y en estas condiciones», analiza.

Mencionó también Riudavets el río Sena y su polémico y lamentable estado durante los Juegos Olímpicos de París, viéndose obligadas las pruebas a aplazarse unos días e incluso con algunos deportistas hospitalizados. «La verdad es que no sabemos nada estos días, tan solo que tienen tres planes; el primero, hacerlo todo como está, el B sería, si hay mucha corriente, tan solo hacerlo nadando a favor y el C, de estar contaminada el agua, convertirse en duatlón», avanza el paratriatleta insular.