El tenista de Ciutadella, Àlex Mesquida, durante uno de sus últimpos encuentros en los EEUU | A.M.B.

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Uno de las mejores raquetas que ha dado el tenis menorquín y balear estas últimas décadas, el jugador formado en sus comienzos en el Club Tennis Ciutadella, Àlex Mesquida, podría estar viviendo en los Estados Unidos sus últimos coletazos como tenista al más alto nivel, después que el menorquín haya recaído de la importante lesión de espalda que lleva un tiempo diezmándolo en la pista. El menor de la pareja de hermanos tenistas –junto a Òscar­–, ha ido sufriendo fuertes molestias en la espalda por una recaída de su lesión crónica que padece en las vértebras L4 y L5 y que le han impedido competir con normalidad. Y finalmente, para males de Mesquida, recientemente al talentoso tenista de la Lipscomb University de los EEUU le han diagnosticado dos fracturas más en la columna vertebral, además de una de sus vértebras, que se ha desplazado un poco.

«He estado toda la temporada prácticamente haciendo rehabilitación y ahora estoy entrenando muy duro y preparándome para los próximos Island Games 2023», señalaba a «Es Diari» Àlex Mesquida, con una incertidumbre total sobre cómo se sentirá y le respetará su maltrecha espalda. «Después de representar a Menorca en los IGA tocará evaluar un poco cómo me siento más de cara al futuro y a lo mejor también enfocarme un poco más ya a mi vida laboral y ver opciones por EEUU o en España», proseguía el tenista menorquín, un raqueta clave tanto estos tres últimos años en la Lipscomb University, como los dos primeros cursos de su estancia en USA, en la Seward County.

Y es que el ciutadellenc tiene asumido que su presencia en los Island Games será el termómetro que medirá su futuro tenístico, de ahora en adelante, sin descartar incluso su retirada del tenis activo al más alto nivel, como ha estado practicando hasta ahora, momento de cerrar su etapa universitaria norteamericana. «Me cuesta decirlo o pensarlo pero yo creo que sí, igual será el momento de empezar a dar un paso al lado», reconocía este martes, Mesquida, eso sí, muy ilusionado en los inminentes IGA de este verano, en Guernsey. «Pero todo dependerá evidentemente de cómo me sienta después de los juegos», insistía. «Allá podré ver qué tal aguanta mi espalda».

Tal llegó a ser la gravedad en cuanto a su estado físico por culpa de la columna vertebral que Mesquida, en su último partido en Estados Unidos, «por apresurarme en volver a la pista lo antes posible, no pude acabar mi encuentro y me tuvieron que trasladar a urgencias en silla de ruedas», recordó, contrariado. «A día de hoy estoy mucho mejor físicamente, me siento bien y sin daño; con muchas ganas de competir y seguir luchando».

Cinco temporadas de ensueño

En USA ha crecido como la espuma y en la Lipscomb tiene el récord de triunfos, siempre jugando de 1 o 2 en individual y dobles, un mal sueño para las universidades top del país como capitán del equipo. También con la Seward County copó siempre posiciones de podio nacionales.

El apunte

Etapa ejemplar de universitario

El tenista ciutadellenc, a la par de ver cómo evoluciona de sus dolencias físicas severas, está meditando su futuro más inmediato, ya a nivel profesional, después que Mesquida, gracias a estos cinco años en la universidad norteamericana, haya conseguido finalizar la liga universitaria de tenis y su Máster de Master of business administration (MBA). Ahora el insular medita «si regresar ya a España o prorrogar un año más en los Estados Unidos», señala.