Puede que esta reflexión caiga en saco roto o no lleve a ninguna parte, pero uno no puede más que asistir melancólico y suspirar recordando tiempos pasados. Contaré, en este caso, un par de crónicas de una 'no muerte' anunciada. La del Bàsquet Manresa y la del Bilbao Basket. Y, de paso, hojearé aquellas páginas que hablaban del Menorca Bàsquet, mientras entrelazo historias, actitudes, porvenires, en fin, algunas cosas que pasaron.
Al Bilbao lo ha rescatado al borde del precipicio la administración pública. Aquella que parece que se ha encasquillado en la frase del 'No hay dinero para...' se ha rascado el bolsillo para adelantar una subvención pactada para los años 2014, 2015 y 2016 que servirá a los comúnmente conocidos como 'hombres de negro' para llegar a final de curso.
La Diputación Foral de Bizkaia patrocinará al Uxue Bilbao Basket bajo el concepto "para la promoción turística del Territorio Histórico de Bizkaia". Vamos, amparado en aquello de que el deporte y el turismo acostumbran a flirtear y a cogerse de la mano. Y todo ello llega después de que el conjunto que entrena Fotis Katsikaris perdiera el pasado sábado la final de la Eurocopa contra el Lokomotiv Kuban (64-75) ya que este tipo de reacciones suelen venir acompañadas de algún título, de algún ascenso o, sencillamente, siguiendo la corriente popular que es la que en mayor o menos medida garantiza simpatías y, para qué esconderlo, un buen saco de votos.
Lo que más sorprende de la noticia que seguramente ha despertado la envidia sana entre los aficionados menorquines al baloncesto es que a principios de año, la Diputación suprimió en sus presupuestos las ayudas al deporte profesional que en el caso del conjunto bilbaíno ascendían hasta los 1,9 millones de euros, cantidad similar a la que manejaba el Govern Balear y el Menorca Bàsquet cuando las vacas estaban gordas y pastaban libres a su antojo. Las suprimió pero luego dio marcha atrás para acudir a la llamada de auxilio.
Aquí, las voces de socorro se fueron apagando entre promesas vacías y una vez que el Menorca ostentaba el dudoso honor de ser el primer equipo que ascendía a la ACB, debía renunciar y semanas después desaparecía. Difícilmente se puede conseguir un impacto social más negativo, Es cierto que hay otras prioridades, pero también lo es que hay otras formas más eficientes de priorizar.
La bruja de Manresa
La historia que ha abrazado al Manresa en las últimas semanas es, cuanto menos, curiosa. Con el equipo prácticamente descendido y abandonado por su mecenas, Assignia, con la llegada del 2013, la enigmática y mediática administración de lotería del municipio de Lleida, Sort, ha adoptado al conjunto del Bages que ahora se llama La Bruixa d'Or Manresa.
La empresa, líder en su sector en España con unos ingresos anuales de 70 millones de euros, se ha comprometido a 'mimar' al club que preside Josep Vives por lo que resta de esta campaña y cuatro más, independientemente de la categoría en la que jueguen. 'Off the record' se especula con unas cantidades de 500.000 euros por año.
Alrededor del club niegan que las instituciones hayan mediado para que se llegara a este acuerdo pero todo apunta a que algún empujón han dado, algo que aquí faltó ya que en el Pavelló todavía andan esperando la llegada de esa empresa con la que en teoría mediaba el director general d'Esports, Javier Morente.
Ahora falta que la fortuna se acabe de aliar con el club para evitar el descenso, aunque el propio Vives amenaza que si descienden volverán más fuertes.
Aquí, como no volvamos de entre los muertos...
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