Escenario de lujo. Los participantes tuvieron que competir dentro del puerto, salir hasta una baliza en la bocana y regresar al Club Marítimo de Mahón, un espectáculo - Jaume Fiol

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El puerto de Maó sirvió ayer de campo de regatas para brindar a los aficionados a la vela una batalla más técnica que rápida en la que resultó vencedor el 'Es tes unno' de Francesc Soldevila, y con base en el Real Club Náutico de Barcelona, coorganizador junto al Club Marítimo de Mahón, de la menorca Sant Joan, trofeo Alfonso XIII, disputado entre el viernes y el sábado.

El Club Marítimo Mahón acogió ayer la última jornada de un fin de semana de alta competición que arrancó con la travesía de 140 millas náuticas que unen Barcelona y Maó y que acabó con la regata Puerto de Mahón, en la que compitieron los participantes que también actuaron en la Alfonso XIII, donde venció el 'Calima', del CM Mahón.

La jornada de ayer arrancó con la salida a las 14.30 horas de las embarcaciones de clase 1 y 2, las más rápidas, mientras que minutos más tarde salieron las de clase 3.

El trazado consistía en navegar por dentro del puerto, salir hasta una baliza que estaba en la bocana y volver antes de las 17 horas. El viento, entre los7 y 8 nudos de media, fue de norte y noreste.

"Navegar dentro del puerto es especial", aseguró Soldevila, patrón del 'Es tes unno', "no sólo es complicado sino que hay momentos en los que los barcos están bloqueados y no te queda otra que girar mientras das agua o te dan".

Para el catalán "requiere mucha tensión y técnica pero supone un plus que lo hace especial".

Joan Cardona, subcampeón

La selección de Balears, en la que ha participado el menorquín Joan Cardona, se adjudicó el segundo puesto en la regata por autonomías de Optimist del Campeonato de España infantil de vela, disputada el sábado en aguas de Cambrils (Tarragona).

El combinado balear, formado por Marc Antich, María Bover, Jordi Juliá, Joan Cardona y Marc Lladó, logró este segundo puesto tras enfrentarse a diferentes comunidades, aunque no pudo superar a la selección Canaria, que se proclamó campeona de España.

El día estuvo marcado por el poco viento, entre seis y ocho nudos, circunstancia que permitió realizar un importante trabajo táctico de equipo. Baleares ganó a la selección de Cataluña en semifinales.