ALEGRÍA. El equipo triunfador, que dio una gran lección de voleibol, posó feliz al término del partido que ganó ayer en Salo - Bep Casasnovas

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Los temores eran excesivos, las bravatas del entrenador finlandés, una fantasmada de primer nivel, o el Valeriano Allés Menorca Volei está ante su gran año. Posiblemente sea esta última la explicación del triunfo incontestable (0-3) que obtuvo el equipo de Chema Rodríguez ayer en el frío nórdico finlandés.

Ni la baja de Helia González, ni el poderoso remate de Virgin de Carne, ni los diez grados bajo cero que reinaban en Salo, a 110 kilómetros de Helsinki, impidieron que el Valeriano sentara cátedra para dominar el partido de principio a fin y liquidara la eliminatoria por la vía rápida, un 0-3 en el que pocos confiaban.

"Seguro que en Finlandia ganamos porque llevamos tres años sin perder un partido en nuestra pista", dijo Leminkanen técnico del Salo en Ciutadella hace una semana. Tamaña seguridad en sus palabras, unida al buen nivel que había mostrado su equipo pese a la derrota por 3-1, y a la lesión de Helia González parecían reducir a su mínima expresión las opciones del CV Ciutadella en esta primera salida europea de la temporada. Nada más lejos de la realidad.

Chema Rodríguez apostó por situar a Yamileska Yantin de '4' y recolocó a Vita Prychepa como opuesta. La jugada le salió redonda porque su equipo fue de menos a más en defensa, empleó un saque cruzado fantástico y, especialmente, el bloqueo resultó una garantía con las centrales Correa y Sabrina Duarte, para cercenar a las jugadoras locales más allá de los puntos inevitables de Carne.

Tras una alternancia de golpes en el set inicial comenzó a imponerse el bloqueo del equipo bermellón –ayer, de blanco–. Vita rompía por la derecha. El empate a 16 fue el inicio del despegue definitivo que acabaría dándole la primera manga al Valeriano. El servicio funcionaba, Yoraxi ordenaba y Vita era el estilete perfecto. Con un 17-20 en el luminoso el tiempo muerto del técnico local (18-22) no detuvo el avance menorquín que se apuntó el set por 21-25 tras un error en el saque de las locales en el último punto.

La afición finlandesa, escasamente entusiasta salvo un grupo de tamborileros, asistía con cierta resignación a la clara superioridad del Valeriano que en seguida tomó ventajas también en el segundo set. Correa y Yantin bloqueaban los remates de Arminen y Niemi (3-6).

El marcador siempre estuvo comandado por las de Ciutadella que con un saque efectivo dificultaban la floja recepción de las finlandesas. Con 6-12 en el luminoso el set parecía bien encaminado aunque las apariciones de De Carne por el centro estrecharon el marcador (16-17). Fue entonces cuando González recurrió a Diana Sánchez en lugar de Sabrina, en busca del punto de calma que necesitaba el equipo para no alterarse por la presión local. Y la jugadora manchega, que por fin debutaba, le dio al técnico lo que le pedía con su sapiencia en la pista y una excelente recepción. Del 19-21 se pasó al 20-24 con la espectacular aportación de Sandell y su temible brazo, y un último remate de Ana Correa puso el 21-25 que dejaba el triunfo a tiro de un set.

Fue quizá esa tercera manga la más complicada porque el LP Viesti Salo sacó su orgullo para pelear por una remontada imposible. El Valeriano cometió errores atrás y de un cómodo 5-10 las locales avanzaron hasta el 18-17 tras un mal saque de Sandell. Rodríguez volvió a recurrir a Diana en lugar de Yantín, al tiempo que Vita y de nuevo la británica recuperaban su arsenal ofensivo para poner las cosas en su sitio (21-24). Y a la tercera bola de partido un derechazo de Vita sentenció el encuentro y la eliminatoria.

El Valeriano ya está en octavos de final a los que accede por la puerta grande.