Este fin de semana arranca la liga EBA más menorquina que ha habido, ya que contará con dos representantes de la Isla por vez primera. Se trata del Jovent y el Alcázar. El club de Alaior retorna a la categoría después de haber tenido que renunciar a la LEB plata por motivos económicos. El equipo mahonés, en cambio, se estrenará este año en la cuarta categoría del baloncesto nacional.
En el grupo E se jugará una liga más corta de lo habitual, ya que dos equipos, el Murcia y el Ibiza, se han quedado fuera porque no entregaron a tiempo sus avales. Por este motivo, la temporada va a empezar más tarde de lo que estaba previsto, mañana, y terminará el 30 de abril. Entre los 14 conjuntos que tomarán parte, los tres primeros accederán directamente al play off de ascenso, y los dos mejores cuartos de las cinco categorías también pasarán. Los dos últimos descenderán de categoría.
En esta tesitura, Luís Arbalejo, en su segundo año como entrenador del Alcázar, declara que "el objetivo claro es salvar la categoría". "Como hemos hecho una buena pretemporada, hay gente que nos ve arriba", dice, pero el técnico considera que, de momento, "no hay que perder de vista la meta principal".
Para alcanzarla, cuenta con una plantilla que mezcla juventud y veteranía. En ella hay también un grupo de jugadores que repite respecto al año pasado (un tercio) y otro bloque de recién llegados (que suponen los dos tercios restantes). Arbalejo considera que "la clave reside en buscar el equilibrio y hacer un equipo". De momento, se muestra "muy contento" con la actitud y el rendimiento de los suyos.
Su homólogo en el banquillo del Jovent, Hugo González, está al mando de un barco lleno de novedades. Él mismo debuta al timón del equipo, en el que sólo continúan tres jugadores. Afirma que la suya, con una media de edad de 21 años, es la tercera plantilla más joven de la categoría.
Eso tiene una parte positiva y otra que no lo es tanto. Sus jugadores tienen "hambre por desarrollarse y ganas e ilusión por competir y hacer las cosas bien". Pero, por otro lado, González no pasa por alto la falta de experiencia de los suyos: "Me preocupa la falta de veteranos", dice, y opina que la mejor cualidad de su platilla es que está "muy compensada" y que cuenta con baloncestistas muy polivalentes. El objetivo del club es la permanencia, pero el técnico cree que "por plantilla, podemos hacer grandes cosas".
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