Distinto deporte, diferentes agujetas

Inmersos en plena pretemporada, tiempo de agujetas por el exigente esfuerzo al que se ven sometidos los deportistas, es un buen momento para que los preparadores físicos Tolo Rosselló, del Sporting Mahonés, Joan León, del Valeriano Allés, y Luís Arbalejo, encargado de la puesta a punto de los jugadores además de técnico del CD Alcázar cuenten los secretos para preparar de la mejor forma la temporada.

Tolo Rosselló
preparador físico del Sporting Mahonés
Pretemporada

La pretemporada dura seis semanas, aunque la anterior al primer partido se considera ya competitiva. La primera semana es introductoria y se realizara una puesta a punto. El objetivo la adaptación al paso del estado de reposo al trabajo.

Durante las dos semanas siguientes se realiza un trabajo general, en gran parte no específico del fútbol. Se centra en aumentar la fuerza y la capacidad aeróbica.

Las carreras continuas son propias de esta época por playas o caminos rurales. Ese terreno refuerza la musculatura de los tobillos, que así reaccionan mejor ante las torceduras.

En las siguientes dos semanas la preparación se vincula más con el fútbol. También se realiza un trabajo compensatorio: se ejercita el tren superior para equilibrarlo con el inferior, más desarrollado. De esta forma se armonizan los grupos musculares, algo que ayuda a evitar lesiones.

Temporada
El trabajo físico es mucho más uniforme. Se busca mantener el estado físico en un nivel alto y constante que mantenga a los jugadores entre el 80 y el 90 por ciento de su capacidad, sin grandes picos de forma. La liga es muy competitiva y no se permiten los bajones de forma.

Pero la preparación es flexible, se varían los ejercicios para trabajar la velocidad, la potencia aeróbica o la fuerza, por ejemplo, y se tiene en cuenta el estado físico de cada jugador. De hecho, deben responder a unos tests sobre su estado físico antes y después de los entrenamientos, aunque ésta es una herramienta que se usa sobre todo en la pretemporada para regular la carga física de las sesiones, durante la campaña también se utiliza puntualmente.
aspectos que se trabajan

Especialmente el tren inferior. Los grupos musculares que más esfuerzo soportan son los abductores, que se utilizan en los cambios de dirección; los gemelos, que intervienen en los movimientos brusco; los isquiotibiales, que se emplean en las acciones de disparo y pase, y los cuádriceps, que se ponen en marcha en los golpeos de balón. En general todos trabajan igual, pero los delanteros ejercitan más la explosividad, los centrales el salto, los laterales el fondo y los centrocampistas un poco de cada.

Alimentación
El doctor da unas orientaciones a principio de año para que los jugadores tengan una alimentación equilibrada pero cada uno se controla a sí mismo. Cuando vamos fuera sí tratamos de que todos coman lo mismo.

Joan León
preparador físico del Valeriano Allés
Pretemporada

Dura ocho semanas y es la parte más importante del año en lo que a preparación física se refiere. Hay más trabajo de fuerza que durante el resto del año. Hay que ejercitar los músculos para que el resto de la preparación vaya bien, lo contrario sería como empezar la casa por el tejado.

Es básico el trabajo con pesas. Ahora hemos realizado unos tests de fuerza máxima. Se trata de saber qué peso pueden levantar como mucho las jugadoras para después hacerles trabajar sobre ese porcentaje dependiendo de las necesidades del momento. En pretemporada trabajan entre un 75 y un 95 por ciento de su capacidad.

Temporada
Durante el año, ese porcentaje oscila entre el 55 y el 75 por ciento. En función del estado de cada jugadora, del momento de la temporada y del equipo rival, los entrenamientos se cargan más o menos.

Cuando el siguiente partido es importante, se busca un esfuerzo menor para que las deportistas no se cansen. En cualquier caso, dado que al final de temporada se juega el play off, la intensidad no puede bajar demasiado. Además, con la competición europea los miércoles, todo es un poco más difícil de planificar.
aspectos que se trabajan

En el voley, cada jugadora tiene una planificación especial dependiendo de su posición. A grandes rasgos, las atacantes trabajan la explosividad en las piernas para conseguir buenos saltos y la fuerza y la velocidad de los brazos para disparar con peligro. Las defensoras necesitan más velocidad de piernas y agilidad en sus movimientos. Las que alternan defensa y ataque, como es lógico, deben preparar ambas facetas.

Las piernas son muy importantes en todas las posiciones, especialmente en las atacantes. También lo es tener unos brazos y hombros duros y ágiles. El tronco también debe estar bien trabajado, especialmente dorsales, abdominales y lumbares. La coordinación y la agilidad también tienen su importancia, aspecto que se entrena ensayando con balones medicinales.

Alimentación
Una especialista en nutrición orienta y facilita documentación a las jugadoras al principio de cada campaña y, después, cada jugadora controla su propia alimentación. Sin embargo, si alguna de ellas necesita algún suplemento, se lo facilitamos desde el club.

Luis Arbalejo
preparador físico del CD Alcázar

Pretemporada
Dura nueve semanas y se divide en dos fases. Durante las cuatro primeras trabajamos con un componente físico muy alto y, al final, realizaremos un stage de cuatro partidos en el que se evalúa el estado físico. Las cinco semanas siguientes son precompetitivas, físicamente se da un salto y se entrena prácticamente como el resto del año.

Gracias al retraso en el comienzo de la temporada, este año podemos trabajar durante más tiempo. De todas formas, como en el Alcázar tenemos algunos jugadores profesionales y otros semiprofesionales, el entrenamiento es distinto debido a los diferentes horarios.

Temporada
Buscamos adecuar nuestro estado físico a la estructura de cada temporada. Cuando se publica el calendario, estudiamos en qué momento nos interesa más estar en nuestro pico de forma y trabajamos para lograrlo, en función de cómo nos hayan tocado los rivales.

Este año, por ejemplo, las siete primeras jornadas son fundamentales para nosotros porque los rivales, en principio, son asequibles. Tenemos que llegar muy fuertes al principio, algo que nos facilitará el retraso en el comienzo de la liga. Después, como es lógico, cada jugador va fluctuando en su forma, pero buscamos alcanzar un estado general.

aspectos que se trabajan
Como el baloncesto es un deporte de precisión, se trabaja mucho el tren superior, algo que solemos hacer en el gimnasio. Son importantes los pectorales, abdominales, lumbares, dorsales, bíceps y tríceps. Cuando el músculo está bien entrenado, la precisión es mayor. En la pista se ejercita más el inferior. Hay que conseguir un buen salto, coordinación y explosividad.

Además, en los baloncestistas se buscan cosas muy diferentes en función de la posición que ocupa en el campo. En los jugadores interiores se busca la fuerza y el volumen. Son jugadores muy pesados que tienen que ganarse la posición gracias a su cuerpo. En los jugadores exteriores, por contra, son más importantes la explosividad y la precisión. La velocidad no es tan importante en baloncesto, pero si un jugador es rápido en carrera y resistente, mucho mejor.

Alimentación
Tenemos dietas personalizadas en función de las necesidades de cada jugador y los profesionales comen en el pabellón.