Toni Ramón aboga por optar a las mejores metas «posibles», no «imposibles», cuando es preguntado por tratar de revivir la etapa de hace una década, cuando el club se codeó con los mejores de Balears, «pero después pagó sus consecuencias». | Katerina Pu

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Toni Ramón Riudavets (1972) afronta la que será su primera temporada en la presidencia del CE Mercadal. Hijo del que también fue mandatario del club, ya fallecido, Ramón Riudavets Orfila, después de dos décadas trabajando para la causa rojiblanca como directivo o fiel colaborador, el paso que ahora traza se entiende por tanto como una consecuencia natural.

En las que son sus primeras manifestaciones tras acceder al cargo, lo que cristalizó hace algo más de un mes, Toni Ramón deja claro que el suyo no será un mandato presidencialista. «Aquí, el menos importante es el presidente, somos como una familia», concede en ese orden, además de desvelar que su nombramiento responde a «un planteamiento de la directiva».

«Vinieron a buscarme con anterioridad en dos ocasiones, y pude esquivarlos, pero ahora no podía negarme. Eso sí, antes de aceptar quise asegurarme un grupo directivo, con gente de confianza de la antigua junta más otras personas que se han sumado», detalla el dirigente sobre el proceso que ha derivado en su acceso a la presidencia.

En los albores de la misma, el proyecto que tiene Toni Ramón en mente se bifurca en dos vías muy claras; el equipo de Tercera RFEF y las categorías de formación. En lo que concierne a estas, celebra que el Mercadal este año active en competición «once equipos de cantera», cuando lo habitual en el club era quedarse en «seis-siete conjuntos».

«Los coordinadores, Eric y Rubén, dos jugadores del equipo de Tercera, han hecho una gran labor al respecto, y el club cada vez es más grande, lo que va aparejado a que el pueblo ha crecido, hay mucha inmigración y con ello, más niños que juegan aquí», razona el mandatario, al que gustaría que al terminar su etapa formativa «hubiera algunos canteranos en la plantilla de Tercera». «No es sencillo, nosotros históricamente sacamos un jugador de cierto nivel de vez en cuando y se iba a jugar a otro pueblo. Es difícil, pero estaría bien que del juvenil y cadete que ahora tenemos, dentro de un tiempo, lleguen al primer equipo», se sincera.

Concerniente al equipo de Tercera RFEF, afianzado desde hace más de un decenio como principal potencia futbolística de la Isla, y ante el inevitable cambio de ciclo que acostumbra a propiciar un relevo en el banquillo, en el caso, con la salida de Lluís Vidal y la venida de Miquel Capó, proveniente del Ferreries y en lo que por añadidura significará su estreno como técnico en la liga balear, Toni Ramón explica que lo que le convenció y más sedujo de este fue, sustancialmente, «su manera de ser».

«Capó hizo una gran labor en el Sporting, como capitán-entrenador, se quedó a un gol del ascenso y vimos que es un hombre de club. Eso es lo que queremos, una persona comprometida; somos un club pequeño, necesitamos gente así, y en su etapa de jugador aquí ya demostró una gran implicación», abunda el presidente mercadalenc sobre su nuevo ‘mister’. En cuanto a los objetivos que se marca el club para esta primera temporada bajo la gestión de Toni Ramón, el directivo es pragmático. «El objetivo no es la permanencia en sí, sino hacer 40 puntos cuanto antes, después ya veremos, pero hay que ir partido a partido. Lo primero es ir a Santanyí a ganar, ir sumando puntos y no estar pendiente hasta el final. También la experiencia de estos años nos ha demostrado que hay que ir al cien por cien desde el primer partido».

La presencia del Migjorn, que debuta este año en liga balear, supone un aliciente más para el Mercadal, por su condición de equipo menorquín, como también por la ancestral rivalidad existente entre dos municipios que hasta 1989 fueron uno solo.

«Llevamos muchos años en Tercera, y el año pasado al coincidir con el Alaior notamos mayor asistencia al campo durante la temporada, más ganas de fútbol, se notaba la rivalidad, y el día que vino el Alaior a nuestro campo hicimos la mejor entrada en la historia del club. Ni cuando jugamos la fase de ascenso a Segunda B contra el Gernika tuvimos tanta gente, por lo que dos equipos en Tercera sí es un aliciente. Para nosotros es una alegría que haya dos equipos menorquines», además de que, sigue y evoca Ramón, «Es Mercadal y Es Migjorn Gran fueron, hasta no hace mucho, un solo municipio, y esa rivalidad siempre ha estado ahí. Recuerdo cuando mi padre era presidente, en el 78, vivió partidos de gran rivalidad. Pero siempre guardando las formas y el fair-play. El año pasado con el Alaior hicimos un acto de hermanamiento y funcionó muy bien».

«Deseo al Migjorn que se salve cuanto antes, y si nosotros quedamos por encima de ellos, pues más contentos, pero lo que debemos hacer es preocuparnos de nosotros, de hacer los 40 puntos y no estar pendientes del Migjorn», apostilla el mandatario sobre la nueva cuota menorquina en Tercera.
¿Y la antigua? ¿Acaso no se echa en falta en la liga balear presencia de Maó o de Ciutadella? «Lo nuestro puede parecer un milagro, pero no lo es. Tenemos 70 empresas detrás, muy pocos clubes tienen eso. Lo del Mercadal son muchos años de historia, hemos sabido cuidar el tejido empresarial del pueblo. Sin ellos sería imposible. Y cuando las empresas de Maó o de Ciutadella quieran, tendrán Tercera. Por lógica, el equipo en Tercera tendría que estar en Maó y Ciutadella, no en Es Mercadal. Es una cuestión de habitantes, pero hay que tener apoyo», analiza.

Y asimismo precisa; «nosotros también hemos tenido siempre un respaldo del Ayuntamiento, desde los tiempos de Sito Riudavets y después con Xisco Ametller ¿único club del pueblo? Hombre, sí ayuda, pero también está el Norteño, debe tenerse en cuenta».

Virando hacia un pasado no lejano, el nuevo presidente del Mercadal ve complicado poder reeditar aquella cumbre de 2015, en que el equipo rojiblanco alcanzó la fase de ascenso a Segunda B. «Aquello fue la combinación de muchos factores. Un equipo potente, un esfuerzo económico enorme, que luego tuvo consecuencias, pues sufrimos. Hay que ver hasta que punto el club puede permitirse una sacrificio así. Creo que debemos optar a las mejores cotas posibles, no imposibles. Mejor hacer algo dentro de tus posibilidades, que no embarcarnos en un viaje que pueda tener malas consecuencias», considera.

Y se extiende; «el Mercadal es de los socios; ellos, con sus manos, alzaron la primera grada del campo, junto al torrente, y cuando ellos han querido, el club ha dado un paso adelante. Eso ha marcado la historia, y esperemos que siga así, el club será lo que quiera su masa social».
Sobre si un proyecto de Segunda RFEF tendría cabida en el marco del fútbol insular actual, Toni Ramón entiende que «sería cuestión de apoyar más al fútbol, ir todos a una. Lo del Bàsquet Menorca ha sido un poco juntar el basket de Maó, Sant Lluís... Si quisiéramos un equipo de fútbol por encima de Tercera, debería ser algo de todos a una».

Antecesor

Sobre el mandato de Toni Vila, al que reemplaza –que además es primo suyo– el nuevo gestor rojiblanco observa que «ha sido un gran presidente» y valora que «tenerle de vicepresidente de la Balear es un puntito más y una gran alegría para nosotros, es un gran relaciones públicas, sabe de fútbol. Nunca desde Menorca se había contado con tanta presencia en la Federació».

Por último, cuestionamos a Toni Ramón desde un punto de vista más personal. Se reconoce gran fan del Barça, «mis ídolos eran Maradona, Migueli…», repasa, pero ha disfrutado «mucho» con la victoria de la selección en la Eurocopa, «un grupo que se divierte jugando», define.

En su caso, «me encanta el fútbol», si bien «nunca» lo ha practicado. «Jugué a baloncesto en mi etapa escolar, en un equipo en el que estaban Marc Pons (el exdiputado y expresidente del Consell), Berto Vadell (epd), Jaume Palmer o Toni Palliser», enumera Toni Ramón, que también se decanta por el tenis, influido por el «fenómeno Nadal», termina el nuevo presidente del Mercadal.

El apunte

Más de 25 años al servicio de un club que lleva en su ADN

Toni Ramón suma más de veinticinco siendo parte activa del Mercadal, al que lleva en su ADN. Su padre le precedió en labores de gestión al frente del club hace más de treinta años. En su caso, su primera incursión se remonta a 1998, cuando entró en la directiva liderada por Paco Salord. También formó parte del equipo gestor de Damià Torres, en 2006, y dos años después se logró el primer ascenso a Tercera en la historia del club, con Elías Noval en el banquillo, «la persona que nos hizo ver que podíamos ir a más como club, una figura muy importante para el Mercadal, que vino aquí con Biel Llabrés, Nico Beamud... », recuerda el dirigente. Con Toni Palliser, «al que dije que mientras él fuera presidente, estaría con él», subraya, ejerció de secretario y en la etapa de Pablo Prieto, «ayudaba, pero no fui directivo», papel que mantuvo en la segunda etapa de Paco Salord, para retornar a la junta con Toni Vila, primo suyo, y «en una etapa difícil, tras la pandemia, el descenso...», reconoce.  Por último, Toni Ramón pone en valor un rostro clave en la cronología del club, Eugenio Villalonga, «una institución que conoce todos los intríngulis del Mercadal» y detalla que «sin el apoyo de mi familia, no estaría aquí».