Ferre, Unión, Villacarlos y Migjorn abren la fase de ascenso a Tercera división

Una de corto recorrido, que es la que agotará mañana el CE Alaior, en virtud de su condición de campeón de Regional (si gana al Felanitx, suscribirá su retorno a la categoría balear después de más de un decenio de ausencia) y una segunda vía, que reclama un trayecto más arduo y prolongado, el cual arranca esta tarde, y que lo hace con una doble eliminatoria de exclusivo acento menorquín.

Ferre y Unión, esta tarde en el campo de Sant Bartomeu por un lado, y Migjorn y Villacarlos, en Los Nogales en similar franja horaria, por otro. A partido único. Los dos ganadores se jugarán después el billete para disputar el playoff definitivo, que incluirá a los ganadores de las respectivas eliminatorias de Mallorca y Eivissa y Formentera, junto con los perdedores de los cruces por el ascenso directo.

Ferre-Unión

Tanto el Ferreries, que ha terminado la Liga Regional en segundo lugar, como la Unión, que fue el último equipo en sellar su clasificación, lo que hizo desde el quinto puesto, alcanzan el partido en pleno acelerón de victorias. Los hombres de Miquel Capó, que han discutido la hegemonía del Alaior hasta la penúltima jornada y se han mantenido durante toda la liga en zona de playoff, se presentan a la cita luego de cuatro victorias seguidas y como flamantes subcampeones (lo que además permite al club regresar a una criba por el ingreso en la liga balear ocho años después de la vez anterior, ocurrida en 2015).

Mientras, la Unión, que no ha podido realmente competir por el título, sí ha conseguido, por medio del ‘efecto Santi Cabiró', revitalizarse en el último tramo de calendario y cerrar la liga con dos victorias de mérito (ante Menorca y Sami). Hace un mes, pocos hubieran apostado por el cuadro unionista, pero la coyuntura ha variado en las últimas semanas y la capacidad mostrada en el feudo del Sami para resolver el pase acredita su candidatura.

Además, al hecho de que el Ferre juegue en casa, factor que probablemente decline el favoritismo ligeramente a su favor, opone la Unión un dato; el equipo de San Carlos ha sido el único de toda la liga que ganó en Sant Bartomeu (1-3), si bien los azulgrana devolvieron el golpe en la segunda vuelta en Maó (0-1) y los varios meses discurridos desde aquel registro relativiza la importancia del mismo (también a efectos sicológicos).

Migjorn-Villacarlos

El otro duelo enfrenta en Los Nogales a Migjorn, tercer clasificado, con el Villacarlos, cuarto, y ambos conjuntos también llegan lanzados al mismo en cuanto a resultados; los verdiblancos han vencido cuatro de sus últimos cinco partidos (más un empate), en tanto que los de Es Castell han hecho pleno en las últimas tres jornadas (sumando 14 goles en ese tramo).

El partido advierte un pronóstico totalmente abierto, incertidumbre que incrementa el hecho de que en la competición liguera los dos equipos se han derrotado recíprocamente (siempre ganó el local; 3-1 en Los Nogales, 2-0 en Es Castell).

Paralelamente, el partido contextualiza un cierto duelo de estilos. El Migjorn, solo trece goles en contra en toda la temporada (únicamente el Alaior, que encajó once, exhibe mayor eficacia defensiva) y apenas dos derrotas sufridas, probará su solidez y orden defensivo ante un Villacarlos que gusta de un buen trato de balón y que destaca por su continuado afán de gol. Tal vez juegue en contra de los de Es Castell la dificultad que han mostrado para puntuar en sus salidas (aunque su mejora en ese aspecto fue evidente a medida que avanzó la temporada), así como el hecho de que el Migjorn es el único equipo de toda la Isla que aún no ha perdido al cobijo de su afición.

Pero todas esas teorías y suposiciones deberán refrendarse sobre el césped. Ferre y Unión por un lado, Migjorn y Villacarlos por otro; el trayecto a Tercera balear, en su vía más larga, empieza a labrarse esta tarde sobre la hierba de Sant Bartomeu y Los Nogales respectivamente.