Lolo Sánchez, por cuyas manos pasó alguna posesión importante, intenta superar la amplitud de Isaac Fígols | Gemma Andreu

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MT SANT LLUÍS 74
CB CASTELLBISBAL 82

La derrota ante el Castellbisbal y el triunfo del Pardinyes en la pista del Sant Nicolau otorgan al Menorca Talaiòtica Sant Lluís una plaza fija de las cuatro que suponen el descenso de categoría. El inevitable rumbo del equipo azul no alteró la dinámica competitiva de las últimas semanas y el grupo de Joan Martínez Escala tuvo contra las cuerdas al Castellbisbal, inmerso de lleno en la lucha por la permanencia, de la que ningún equipo está aún exento a cinco jornadas del final.

La primera parte se ajustó a la hoja de ruta diseñada por el técnico de Gavà. Sólo el desequilibrio en el reparto de faltas (7-1, 14-7) impedía al quinteto local tomar el mando del electrónico.

Tras cinco meses en el dique seco, Martínez recurrió a Dani García (12 puntos) en el primer aviso catalán (23-30). El base de Badalona se estrenó con una extensión de izquierda y un 2+1, el Sant Lluís corrigió detalles y alcanzó el vestuario con ventaja (34-33).

El parcial insular se estiró hasta el 41-33 (18-3) que situó un acertado Artiles (24 puntos). El peso de las faltas (3 de Isma, Sergio, Piris) limitó una rotación castigada de inicio por la baja de Ibon Miralles. El Castellbisbal, liderado en ataque por Guàrdia, recuperó terreno y le devolvió un parcial de 4-18 (46-53), que el Sant Lluís ajustó en el último minuto del tercer cuarto (52-56).

Isma Seguí clavó dos bombas desde 6,75 en el inicio del último acto (60-58). Pero los errores propios y ajenos castigaban en exceso el esfuerzo local (64-72, a 3:36). Dani García situó por dos veces el parcial a sólo 4 puntos (68-72, 70-74 a 1:38), pero los continuos viajes al tiro libre de los catalanes y el goteo de eliminados cercenó las opciones de obtener el primer triunfo ante su afición.