Carre y Franco, junto a Estarellas, en una reunión

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La Primera Balear, restablecida tras el fallido y efímero experimento que resultó la EBA Balear disputada en 2014/15, conocerá su itinerario en las próximas horas, del que depende también si los clubes comulgan con el planteamiento de la Federació de instaurar la Copa Federació, que se disputaría entre la primera fase (de carácter insular) y la segunda (de rango interinsular).

La FBIB, y sobre lo que los clubes deben decidir, propone el inicio de la primera fase de la competición para el próximo 4 de octubre, que se prolongaría hasta finales de noviembre. Después, del 12 al 13 de diciembre, los dos mejores de Mallorca e idem de Menorca disputarían, a modo de Final Four en sede única, la Copa Federació, quedando el arranque de la segunda fase (que concentraría a los tres mejores clasificados de cada isla en el grupo por el título, y al resto, en otro grupo, también interinsular) emplazado para el 17 de enero de 2016.

Ese extremo, en principio, no sería 'negociable', al margen de que la Copa Federació sea o no alumbrada, en tanto que desde el Govern Balear no se costearán billetes de avión para los desplazamientos hasta el próximo año natural.

Sí, empero, de no haber Copa Federación (que queda por ver la disponibilidad o interés de los clubes al respecto) el inicio de curso podría demorarse una semana (del 2 al 9 de octubre), lo que sin embargo no afectaría a la segunda fase.

Entre hoy y mañana –vía correo electrónico– los clubes, tanto menorquines como de Mallorca (Eivissa no cuenta con equipos en la liga), deben remitir su postura al organismo federativo y este, tras deliberar en base a la corriente mayoritaria, definir el calendario de fechas, un aspecto que empieza a preocupar en algunos clubes, que sin la referencia del inicio de curso, están viendo seriamente condicionada la programación de la pretemporada. Sobre la inclusión o no de la nueva Copa Federación en el calendario balear, existen diversidad de pareceres en la Isla. Algunos clubes como La Salle Mahón consideran que la competición podría «ser atractiva». También un avance de lo que el basket menorquín encontraría en la pugna por el título en la segunda fase.

Desde el Alcázar, por contra, el presidente de le entidad, Paco Franco, se muestra más escéptico, y alberga mayores dudas sobre el torneo, especialmente «definir» donde se jugaría y si los clubes estarían dispuestos a viajar, considerando que, hasta enero de 2016, el Govern no se hará cargo de gasto alguno por desplazamientos.