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Paco Olmos es un león y el Menorca Bàsquet, su rugido. El entrenador valenciano es consciente de que su equipo no sólo tiene posibilidades de ganar los partidos en casa, sino que también puede hacerlo lejos de la Isla, como ya demostró en Alicante. Pero para ello "hay que crecer un punto en mentalidad ganadora y de carácter", un aspecto que se ha trabajado con intensidad esta semana en el Pavelló. Ahora el Gran Canaria 2014 será el primer juez de esa hambre de victoria del conjunto menorquín.

Olmos sabe que se encontrará "una afición animosa, un pabellón pequeño que aprieta mucho, con jugadores veteranos como Moran o Savane, un entrenador con una filosofía muy marcada y ligada al club como Pedro Martínez, y un jugador por encima de todos los demás, Jaycee Carroll, el mejor anotador de la Liga". Pero en esta primera disección del equipo canario el valenciano ya ve opciones para su equipo. "Si vamos con la idea de que hemos cumplido por haber ganado al Granada, es mejor no salir", reconoce el 'coach' del Menorca que describe al Gran Canaria como "un conjunto que utiliza a diez jugadores por cuarto, lo que le ayuda a mantener la intensidad y cuya gran virtud está en el nivel defensivo, una defensa bien trabajada y muy agresiva".

Otro aspecto que preocupa a Paco Olmos es la aportación de Carroll en ataque al que espera que su equipo frene en el aspecto anotador, además de "aguantar la intensidad de su ritmo, evitando pérdidas de balón y botes inútiles en ataque". Ese aspecto, Olmos cree que "no será un trabajo defensivo exclusivo del perímetro, sino que la victoria pasará por el esfuerzo colectivo". En este sentido, el preparador valenciano no quiere que sus jugadores se amparen en ninguna excusa externa del partido. "No debemos valernos de excusas por el cambio de horario o la humedad... Hay que ir ganándonos el respeto en la Liga, un camino muy largo que nos queda por hacer".

Y es que para el jefe del vestuario del Menorca el equipo debe formarse una identidad seria cuando juega lejos del Pavelló. "Los partidos de casa dictarán nuestra salvación pero fuera de casa tenemos nuestras armas y hay que encontrar nuestro estilo y llegar a ser un equipo correoso, difícil de defender por la movilidad de algunas posiciones pero para hacerlo debemos llegar mentalizados"

La mentalidad ganadora es la que ha imperado tanto en los entrenamientos de la semana, que se han visto condicionados por las ausencias por lesión de los jugadores vinculados del CB Jovent, Rafa Molina y Joan Faner, lo que ha evitado que Paco Olmos pudieran dar descanso a otros jugadores y rotación en las comparecencias.

Y todo ello llega tras "una victoria importante para mantener el pulso a la Liga y por ser fieles a nuestra filosofía", pero que según Olmos debe prolongarse lejos del Pavelló.