NEGOCIACIÓN

Primer choque entre patronal y sindicatos por el convenio de hostelería

UGT rechaza las propuestas de restauración y ocio nocturno por «atentar contra los derechos de los trabajadores»

Imagen de la primera reunión de negociación del convenio hostelero celebrada en la sede de UGT de Palma el pasado 28 de febrero. | T. AYUGA

TW
17

Primer encontronazo entre patronales y sindicatos por el convenio de hostelería. La Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT (FeSMC) se opone frontalmente a las propuestas que las patronales de restauración y ocio nocturno han presentado en la mesa de negociación del nuevo convenio porque consideran que «atentan contra derechos conquistados por los trabajadores, como son los días de vacaciones, libranzas, permisos y festivos».

Además, según UGT, restauración y ocio nocturno proponen dejar de pagar el complemento de Incapacidad Temporal, una cantidad que la empresa suma a la nómina del empleado en situación de baja temporal como complemento a la cobertura mínima garantizada por la Seguridad Social.

Para el secretario general de la FeSMC-UGT, José García Relucio, «son propuestas que pretenden desregular el sector y modificar derechos conquistados por los trabajadores copiando el convenio de Tenerife. Y no es comparable, ya que allí hay actividad durante todo el año y aquí sufrimos una mayor estacionalidad. No lo vamos a aceptar».

Fuentes de CAEB Restauración consultadas ayer por este diario declinaron hacer declaraciones sobre el convenio de hostelería hasta que esté más avanzada la negociación.

Los sindicatos esperan que las patronales den respuesta a sus propuestas en la reunión que mantendrán este jueves en la sede de CAEB, la segunda del calendario de negociaciones. A diferencia de CCOO, UGT concretó y cuantificó sus peticiones en la primera reunión de negociación celebrada el pasado 28 de febrero: subida salarial del 19 % en tres años; reducción de la jornada laboral a 35 horas semanales; elevar a nueve meses el periodo de trabajo garantizado de los fijos discontinuos; ampliar la medición de las cargas de trabajo al personal de cocina y comedor y más formación y conciliación.