Manuela Cañadas (izquierda) y el conseller d'Educación, Anton Vera, en un pleno del Parlament. | Mique Angel Cañellas

TW
48

Los baños mixtos en los colegios se han convertido en la cruzada de Vox al inicio del año en Baleares. En un sólo día, concretamente el pasado lunes, el registro del Parlament acumuló 1.583 preguntas. Lo que el grupo parlamentario que lidera Manuela Cañadas en Balears quiere saber es cuántos centros educativos públicos y concertados tienen baños mixtos, si se han recibido denuncias en la inspección educativa o en las direcciones de los centros y cuántas y si existen protocolos de actuación.

Lo que recoge el registro del Parlament –y que la Mesa, que se reúne este miércoles, tendrá que valorar– son 761 variaciones (tantas como aulas de los centros) sobre cada una de las tres preguntas, hasta sumar 1.583.

«El sistema informático es el que ha generado esa multiplicación. Nuestras preguntas no citaban cada una de las aulas como aparece en el registro del Parlament», dijeron.

Sobre las razones que llevan al partido a interesarse sobre este asunto, un responsable de Comunicación se remitió a una declaraciones anteriores de la portavoz Manuela Cañadas.


«Ideología ‘woke’»

Según ésta –en línea con la estrategia estatal del partido que ha planteado este asunto tanto en el Congreso como en otros parlamentos autonómicos– «la privacidad y seguridad de los niños debe estar por encima de cualquier ideología woke que se pretenda imponer en los centros educativos».

«Ideología woke» es una expresión habitual de la extrema derecha –tanto en Europa como en los Estados Unidos– para referirse a planteamientos de la izquierda y que, según Cañadas, «hay que hacerles frente pues forman parte de la batalla cultural» que plantea su formación.
Según la tesis de Vox (matizada desde Educació, que señala que se faciliten «espacios inclusivos») se están «imponiendo» los baños mixtos en los colegios como una «concesión» a la «ley trans» en lo que este partido define como «ideología de género».

«Lo que hacemos en responder a la preocupación de las familias», indican y ponen como ejemplo la denuncia de una madre en un centro de Calvia y su recogida de firmas.

No es la primera vez que Vox presenta centenares de preguntas sobre una misma cuestión pero sí es la primera en que se atribuye a un programa automático de ordenador que las genera. Tampoco es Vox el único partido que dirige preguntas o solicitudes de documentación con contenido prácticamente idéntico. Todas estas preguntas reclaman respuesta por escrito y el Govern está obligado a responder.