De hecho, diversos estudios ponen de manifiesto que su poder adquisitivo es mayor que el de muchos jóvenes. «Ahora se está jubilando la generación del baby boom, que ha disfrutado de salarios más elevados que los que ahora tienen sus hijos. Por tanto, tienen salud, tiempo y dinero para moverse por el mundo», explica el presidente de Aviba.
En este punto, destaca que la tercera edad ya representa entre un 30 % y un 35 % de los clientes de las agencias de viajes, un porcentaje que se ha ido incrementando en los últimos años. Esto ha motivado que el número de touroperadores especializados en este sector haya pasado de tres o cuatro a una docena en sólo unos años. «Esto demuestra que hay demanda», argumenta.
Catálogos alternativos al Imserso
Además, precisa que incluso hay agencias de viajes, como Viajes Tramuntana (con sede en Mallorca), Club de Vacaciones (del grupo Corte Inglés) y la misma Ávoris, que organiza este año los viajes del Imserso, tienen sus propios catálogos alternativos destinados a mayores de 55 años. Uno de ellos, el conocido como low cost, es similar a los productos que ya ofrece el Imserso, pero con la diferencia de que da la opción de elegir las fechas y el destino. Su precio suele ser entre 80 y 100 euros superior a los paquetes subvencionados por el Gobierno. El otro es el premium y son viajes más caros, en los que los clientes demandan también ciudades europeas (Roma, Budapest, Lisboa, etc.), e incluso, hay muchos que se van a Asia. Aquí también se incluyen los cruceros, especialmente los fluviales.
Una de las demandas en las que suelen coincidir los mayores de 55 años es que quieren viajes organizados, es decir, con las comidas y las excursiones organizadas. «Los mayores de 55 años no suelen querer complicarse la vida pensando qué lugares visitar o cómo, ni dónde comer», expone. Además, añade que tampoco les resulta agradable tener que hacer colas para coger viajes, que puede que no se adapten 100 % a sus gustos. Por ejemplo, de los viajes culturales, que suelen ser muy demandados, hay muy pocas plazas.
El presidente de Aviba insiste en la necesidad de repensar los viajes del Imserso y destaca que la propia directora del citado organismo público, Mayte Sancho, lo ha reconocido recientemente. Mientras tanto, el mercado libre ya está aprovechando la oportunidad que representa este nuevo nicho de mercado.
10 comentarios
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SelenitaMiserias
SelenitaNo te quepa duda. A mi me pasó lo mismo, de las 9 hasta las 11h estaba todo bloqueado, y luego cuando por fin puedes entrar en la web, todo completo.
SelenitaYo estoy casi seguro que las agencias, al menos las del grupo al que le han concedido los viajes, los ven primero por intranet.
Estos viajes son carisimos.No todos los jubilados se lo pueden permitir
La codicia de los isleños. Esto explotará algún día en forma de falta de calidad de vida, por falta de niños, gente cualificada y falta de personal de servicios públicos.
Los jubilados venden su inmuebles por precio de oro…dinero hay…
Me parece una buena iniciativa. Hay que ver si los precios se quedan igualmente ventajosos o es una trampa.
El turismo salvaje buscando dinero de donde sea.
No me extraña, este año la emoresa concesionaria ha degradado los viajes al máximo buscando sacarles el máximo beneficio. Mientras Imserso mira para otro lado. Hasta la tempoada pasada los viajes servian para que los hoteles completasen sus clientes en temporada baja con uno o dos grupos de clientes del Imserso (40 100 personas( de forma que el hotel no tuviese que cerrar. Este año la concesionaria concentra a los jubilados llenando 4 o 5 grandes hoteles de más de 700 plazas en lugares con malas comunicaciones de transporte público. Es el caso de la Manga donde en 4 - 5 hoteles concentran más de 3.500 jubilados, llenan diariamente una docena de autobuses con las excursiones que venden y venden miles de botes de la milagrosa "pomada del silencio" a base de áloe (a 15 €), de la que hacen velada propaganda de que lo cura todo "yo no la he probado pero hay clientes que me han dicho que tenían dolores aquí o allí y notaron gran mejoría". En algunos de estos hoteles, como el caso del Entremares, donde estuve, separan los 700 jubilados de los 50 - 100 clientes del hotel en 2 comedores, con 2 menús diferentes ( supongo que es la única forma de hacer rentable un hotel lleno unicamente de clientes del Imserso, con los escasos 25 €/ día que les pagan). Los viajes no estaban pensados para llenar hoteles unicamente de jubilados sino para completar los huespedes hasta mínimos que les permita permanecer abiertos, sin mermar la calidad. Imserso no hace encuestas a los viajeros por lo que no se entera o no le interesa. Todo eso además de que habría que subir lo que recibe el hotel.
Desde las islas pescar un viaje del IMSERSO es tarea casi imposible, a las nueve de la mañana delante del ordenador , entras y está todo rojo desde el primer día, después entras cada día mañana y noche y sale algunos en espera. He llegado a la conclusión de que existe mangoneo en la adjudicación de plazas.