O cesiones o elecciones

En cualquier caso, si hay que hacer un pronóstico, que siempre es muy arriesgado, tal y como están las cosas este lunes 19 de junio, es más posible que haya nuevas elecciones a que haya un Govern PP-Vox. Dicho de otra manera, si alguien cede, cederá Vox y se quedará fuera del Govern para martirizar a Marga Prohens durante cuatro años en la oposición. Eso es el dibujo más certero de lo que pasa hoy, pero mañana hay pleno del Parlament y se verá si lo de hoy vale o si mañana se dibuja otro escenario.

Unas elecciones son ahora mismo una jugada de riesgo y ni PP ni Vox las quieren porque no se sabe qué puede pasar, aunque los vientos soplen a favor de la derecha. ‘Acabar con el sanchismo' se ha convertido en su guía. Esa es la misión que se han marcado PP y Vox y lo que suceda en las intituciones de Balears de aquí al 23 de julio puede tener escasa influencia frente a esa necesidad superior de echar a Pedro Sánchez.

La lógica política de lo que hemos ido viendo estos días en Balears –y en otras comunidades autónomas– hace pensar que no habrá elecciones y el relato oficioso de las negociaciones invita a pensar que será a costa de que Vox no entre en el Govern, o mejor dicho, en el Consell de Govern.

En cualquier caso, ¿qué pasaría si hubiera nuevas elecciones en Balears por la incapacidad de PP y Vox de ponerse de acuerdo? Los de Abascal tendrán que inventar un nuevo líder si, como parece, Jorge Campos marcha a Madrid como candidato al Congreso. Al otro lado, en la izquierda, el PSIB también tendría que improvisar: ¿el regreso de Francina Armengol del Congreso y arriesgarse a una nueva derrota y a quedar en la oposición en el Parlament?, ¿y si el PI consigue los 2.000 votos que le faltaron para entrar? Política ficción ¿con toques verosímiles?