Este pasado domingo de madrugada la Sala del 091 recibía una llamada del hermano de la víctima. En ella el hombre notificó que una de sus hermanas no dejaba entrar en el domicilio común a la otra.
Al acudir los agentes al lugar confirmaron que en el domicilio vivían las dos hermanas y que, hace aproximadamente dos meses, la detenida le había quitado las llaves. Desde entonces había estado viviendo en el portal de la vivienda.
De hecho, los policías encontraron en el rellano del portal varios enseres personales de la víctima y, en este caso, al tener indicios suficientes de que se estaba produciendo un delito de coacciones procedieron a la detención de la autora.
Esta mujer, por su parte, manifestó a los agentes, que era cierto que había echado a su hermana y argumentó para ello que «es muy problemática y le genera muchos problemas».
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