Desde 2007, los empleados que perciben el sueldo más bajo se han incrementado más de un 11 por ciento.

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La expresión de 'trabajadores pobres' que en los últimos años ha cogido fuerza cobra sentido al analizar los datos de la Declaración Anual de Retenciones e Ingresos a Cuenta sobre Rendimientos del Trabajo de la Agencia Tributaria. Prácticamente la mitad de los trabajadores de Balears cobró menos de mil euros al mes en 2015 (último año con datos disponibles), tendencia que se repite desde 2013.

De un total de 474.181 asalariados en 2015, un 48,5 %, percibió un sueldo de hasta 973 euros mensuales con 14 pagas anuales. Se trata de un grueso significativo de la clase trabajadora a la que no se puede calificar ni de 'mileurista'. Este colectivo no ha parado de crecer desde el inicio de la crisis.

Los trabajadores que cobran menos de mil euros mensuales se incrementaron un 11,2 % entre los años 2007 y 2015, mientras que, en este mismo período, el total de asalariados descendió un 4 %. Esta evolución se refleja en la Encuesta de Condiciones de Vida que elabora el Instituto Nacional de Estadística, en la que las personas que llegan a final de mes con dificultad o mucha dificultad presentaron valores máximos en 2015.

Problemas

En concreto, un 17,9 % de los ciudadanos de las Islas llegaba con mucha dificultad a final de mes en 2015, muy por encima del 7,4 % que se encontraban en esta situación en 2007. Y es que de los más de 230.000 trabajadores que no llegaban a los mil euros anuales hace dos años, más de un tercio, es decir, 79.362, percibía un sueldo de hasta 4.525,2 euros al año. Esto es, 323 euros al mes repartidos en 14 pagas.

Se trata de los trabajadores que cobraban solo la mitad del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que en 2015 estaba fijado en los 9.080,4 euros anuales. El número de asalariados que se encuentran en este estrato salarial se ha ido incrementando de forma progresiva durante la crisis ya que en 2007 había alrededor de 15.000 menos. Entonces el SMI estaba establecido en los 7.988,4 euros. En 2015, casi 150.000 trabajadores tenían un salario inferior al SMI, mientras que en 2007 no llegaban a los 130.000.