Parados esperando para poder entrar en una de las oficinas del SOIB en Palma.

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El Govern prevé poner en marcha en esta legislatura más de 20 programas para fomentar las políticas activas de empleo entre los colectivos más desfavorecidos, que supondrán una inversión de 67,5 millones de euros y beneficiarán a más de 20.000 personas.

El conseller de Trabajo, Comercio e Industria, Iago Negueruela, explica que, cuando en julio de 2015, empezó su labor al frente de la Conselleria «nos encontramos que muchas de las políticas activas de empleo no se habían planificado y con todos los Fondos de Garantía Juvenil sin utilizar y con únicamente 300 jóvenes inscritos en el sistema».

«Nos preocupaba la situación de los jóvenes y de los parados de larga duración, especialmente los mayores de 45 años», añade Negueruela. Por ello, lo primero que hicieron fue planificar las políticas poniendo especial atención en estos dos colectivos de desempleados.

Para el conseller, es fundamental que «la formación profesional esté dirigida especialmente a los sectores emergentes para que la gente vea que detrás de la formación hay puestos de trabajo, y trabajo de más calidad».