El PSIB acusó ayer al Govern de "romper un consenso básico" que existía en la sociedad balear en relación a la lengua, al haber iniciado los trámites para que el catalán deje de ser un requisito en el acceso a la función pública.
El diputado socialista Cosme Bonet ha criticado en un comunicado que la modificación que pretende realizar el Ejecutivo supone un "claro incumplimiento" del Estatut, que, además, haría necesaria la modificación de éste, por lo que ha pedido su "inmediata retirada".
Asimismo, el socialista ha considerado que esta propuesta supone una "discriminación" de los derechos de los ciudadanos, quienes no podrán ser atendidos en una de las lenguas oficiales de la comunidad.
Por otra parte, ha recordado el "anterior intento del PP" de rebajar el conocimiento del catalán para el acceso, lo que se conoció como decreto Rodríguez, y ha subrayado las desigualdades que creaba entre los propios funcionarios. En este sentido, ha apuntado que esta situación se podría repetir con la propuesta actual al exigir sólo el conocimiento de la lengua catalana entre el personal docente.
Por su parte, el grupo parlamentario del PSM-IniciativaVerds-Entesa y Més Menorca ha considerado "intolerable" el "misil" lanzado por el Govern al haber iniciado los trámites para que el catalán deje de ser un requisito en el acceso a la función pública y ha criticado que, de esta manera, pretendan "arrinconar" el idioma al no darle "el rango de lengua oficial".
El diputado del grupo Antoni Alorda ha tildado esta medida del Ejecutivo liderado por José Ramón Bauzá de "atentado contra la oficialidad" de la lengua catalana.
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