TW
0

Pamplona ya está preparada para una de las fiestas más importantes del año: San Fermín 2024. Aunque la ciudad ya se ha empezado a teñir de blanco y rojo desde principios de mes, los actos oficiales empiezan con el chupinazo, este 6 de julio, y se alargan hasta la medianoche del 14 de julio, cuando se entona el 'Pobre de mi'. Durante esta semana, las calles acogerán a miles de ciudadanos y turistas que disfrutarán de la música, los encierros y un amplio programa de actividades.

San Fermín arranca este sábado con el esperado lanzamiento del cohete desde el balcón del Ayuntamiento. Este acto, que todos los años tiene lugar el 6 de julio, anuncia el inicio de la fiesta. En esta ocasión, los encargados de soltar el chupinazo serán los dantzaris de Duguna: Aritz Ibáñez, Ángel Arana e Itxaso Martínez de la Pera.

Los ciudadanos y turistas más madrugadores ya han ido a coger sitio a la plaza del Ayuntamiento para vivir en directo este evento que anuncia el arranque de las fiestas, aunque el estallido se produce a las 12.00 horas. Una vez se lanza el chupinazo, los asistentes tiran sus pañuelos rojos al aire y comienzan a corear '¡Viva San Fermín! ¡Gora San Fermín!'.

¿Qué es el chupinazo de San Fermín?

Los actos religiosos, los mercados y los espectáculos han estado presentes en los festejos en honor a San Fermín desde sus inicios. Sin embargo, el chupinazo no. Es relativamente reciente, ya que esta tradición se remonta a la Segunda República. Un estanquero de la calle Mayor de Pamplona, Juan Etxepare, fue el primer pamplonés en lanzar un cohete. En 1931, pidió permiso al Ayuntamiento para tirar cohetes a pie de calle el 6 de julio a las 12.00 horas en la plaza del Castillo.

El acto se mantuvo los años posteriores hasta 1936. Juan, que era republicando, fue fusilado por el bando sublevado. Durante los años de guerra se paralizó esta tradición, pero en 1939 fue retomada por Joaquín Ilundáin, el alcalde de la ciudad. A principios de la década de los 40, y más concretamente en 1941, el chupinazo se trasladó al balcón del Ayuntamiento, desde donde se sigue haciendo en la actualidad.

Uno de los actos simbólicos de San Fermín

El chupinazo se convirtió en una forma de unificar y formalizar el inicio de las celebraciones, ya que este acto congregaba cada año a miles de personas en la plaza del Ayuntamiento. Rápidamente se consolidó y pasó a ser uno de los eventos centrales del programa de actividades y el más simbólico de las fiestas.

El lanzamiento del chupinazo siempre había recaído en alguna persona relevante de Pamplona, designada por el Ayuntamiento: desde el alcalde o hasta un personaje destacado de la capital navarra. Sin embargo, desde el año 2016 son los propios ciudadanos los que eligen quién recibirá este honor. Así, se implica a la población de forma directa en las fiestas.