Las Oriónidas se producen todos los años en esta época del año, cuando la Tierra atraviesa la zona del espacio en la que han quedado restos de material que el famoso cometa Halley deja a su paso en cada vuelta que completa alrededor del Sol, algo que realiza cada 76 años.
Tal y como indican desde eltiempo.es, la órbita de este cometa viaja en dirección opuesta a la mayoría de los objetos del Sistema Solar, es decir, en dirección opuesta a la que se mueve la Tierra, por lo que esta lluvia de meteoros es mucho más rápida que otras.
Su radiante, el punto en el cielo del que parecen provenir las Oriónidas, es la constelación de Orión, de ahí que esta lluvia de estrellas tome su nombre, y no porque la fuente de los meteoros sea esta constelación, explica la NASA en un comunicado.
Cuándo se verá mejor
Las Oriónidas alcanzan su punto máximo a mediados de octubre, y "se considera una de las lluvias más hermosas del año", indican desde la NASA. Este año, el pico de actividad se producirá en la noche del 20 al 21 de octubre, donde se podrán llegar a ver hasta 15 meteoros por hora, siempre y cuando la luna lo permita, matizan la agencia espacial estadounidense.
En el caso de España, la luna estará muy próxima a la fase de luna nueva —que ocurrirá el 25 de octubre—, por lo que facilitará la observación de este fenómeno, siempre y cuando la situación meteorológica lo permita.
Para su observación, la NASA explica que no solo dirigiendo la vista hacia la constelación de Orión se podrá contemplar este espectáculo, sino que será visible desde cualquier punto del cielo nocturno. La agencia espacial recomienda ver las Oriónidas "a una distancia de 45 a 90 grados del radiante", ya que desde esta perspectiva de escorzo se produce un efecto visual por el que las estrellas fugaces "aparecerán más largas y más espectaculares". En cambio, añaden, "si miras directamente al radiante, verás que los meteoros serán cortos".
Hacia las 2 de la madrugada —hora peninsular española—, la constelación de Orión alcanza el punto más alto del firmamento, por lo que será la mejor hora para poder contemplarlas desde cualquier punto.
Al igual que todas las lluvias de estrellas, su mejor observación es desde aquellos lugares apartados, con la menor cantidad de contaminación lumínica posible, ya que el brillo de los meteoros de las Oriónidas son tenues. Asimismo, es preferible contemplarlas en espacios abiertos, para tener un ángulo de visión mayor.
La web Light Pollution Map puede servir de ayuda a la hora de consultar cuáles son las zonas oscuras más próximas y que, por tanto, presentan unas condiciones óptimas para la observación de estrellas.
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