El hombre de 60 años, que difundía sus teorías en sus redes sociales, perdió la vida el pasado 6 de abril. La autopsia ha confirmado que lo que en un primer momento parecía un simple resfriado resultó ser COVID-19.
Según la radio pública noruega NRK, al menos otras doce personas se contagiaron en las mencionadas fiestas. En estos momentos se investiga si hay más personas que se podrían haber visto afectadas por este brote.
Los medios locales incluso publicaban un aviso urgente a los participantes: «No sabemos cuántos y quiénes han participado en el evento, pero pedimos a los participantes que realicen una prueba corona lo antes posible».
El fallecido se definía como «investigador independiente» y aseguraba que la COVID-19 es «un engaño». Gaarder utilizaba varios canales de internet para publicar información falsa relacionada con la pandemia, donde comparaba el coronavirus con «algo que será como un resfriado o una gripe leve» y argumentaba que no se transmitía de persona a persona. Pero esta no era su única teoría, en el portal Nyhetsspeilet.no incluso ponía en duda el atentado de Utoya y las elecciones estadounidenses de 2020.
2 comentarios
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Da igual. Los negacionistas seguirán diciendo que no murió por COVID, que todo es un montaje, etc. No hay peor ciego que el que no quiere ver.
Buena lección para los negacionistas conspiranoicos. A ver si abren los ojos. Lo que mata realmente son sus teorias absurdas