Este viernes se cumplen veinte años de la creación del CNI, que hasta entonces era el Centro Superior de Información de la Defensa (CESID), una efeméride que como cada año se ha aprovechado para recordar a los miembros caídos en el ejercicio de su misión, han señalado a Efe fuentes del centro.
Un acto muy emotivo en el que, además, se ha puesto en valor el orgullo de pertenecer a esta institución del Estado, en estos momentos en entredicho por la polémica sobre el espionaje a los teléfonos móviles de más de 60 políticos independentistas, así como a los del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y de la ministra de Defensa, Margarita Robles, a través del sistema Pegasus.
Plena defensora del CNI
Precisamente para aclarar este asunto, la directora del CNI compareció ayer en la comisión de secretos oficiales, en la que aportó a los diputados las autorizaciones judiciales para espiar a una veintena de políticos independentistas, entre ellos el actual presidente de la Generalitat, Pere Aragonès.
Así lo indicaron a Efe fuentes conocedoras del contenido de la reunión, que añadieron que en su comparecencia la directora del CNI se desvinculó del resto de escuchas, hasta 65, denunciadas por los grupos independentistas.
La crisis abierta a raíz de conocerse el espionaje con Pegasus, un programa espía que, al parecer, solo pueden comprar los Estados, motivó la suspensión del acto público que estaba previsto celebrar con motivo de los 20 años del CNI.
Una jornada en la que se quería dar a conocer mejor a la ciudadanía este organismo, dependiente del Ministerio de Defensa, y poner en valor su contribución a la seguridad nacional y a la defensa de los intereses de España en un intento de ofrecer una imagen de "cercanía" y "transparencia", según aseguró su directora.
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