El Gobierno anunció ayer que el Estado central asumirá el 0,5 por ciento adicional del déficit que impuso el lunes el Eurogrupo a España. Aunque este anuncio supone que las comunidades autónomas mantienen su límite en el 1,5 por ciento, desde el Ejecutivo se ha señalado que esto "no significa dar más flexibilidad a las administraciones territoriales, que quedarán comprometidas para el ejercicio siguiente". El Ejecutivo de Mariano Rajoy también ha destacado que aceptará este recorte sin subidas fiscales "injustas" y sin la obligación de subir el IVA.
Fue el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, quien confirmó ayer en el Pleno del Congreso que el Estado será quien asuma el 0,5 por ciento extra de reducción del déficit impuesto por el Eurogrupo, que exige llegar al 5,3 por ciento en vez del 5,8 por ciento que había previsto el gabinete 'popular'.
"La reducción mayor del déficit público recaerá sobre el presupuesto de la Administración General del Estado, de manera que ese 0,5 por ciento estará en los Presupuestos Generales del Estado", dijo Montoro en su primera intervención en la Cámara baja, apostillando a continuación que "eso no significa dar más flexibilidad a las administraciones territoriales, que quedarán comprometidas para el ejercicio siguiente", ya que la decisión del Ejecutivo supone que las comunidades autónomas mantengan su límite en el 1,5 por ciento.
Según el ministro, ese esfuerzo extraordinario que tendrá que acometer el Gobierno central supone únicamente "adelantar" lo que en cualquier caso habría sido necesario hacer en 2013, cuando el déficit público del conjunto de las administraciones no pueden superar el 3 por ciento del PIB, objetivo que calificó de "irrenunciable".
Por otra parte, Montoro descartó que el Gobierno vaya a llevar a cabo subidas de impuestos "inequitativas, injustas y que profundicen en la recesión económica", aunque no renuncia a hacer "uso de instrumentos fiscales de manera ponderada, equilibrada y justa socialmente" que no hagan "recaer las cargas del ajuste sobre los más débiles".
"Renunciamos a proyectos de gasto, pero no a hacer uso de instrumentos fiscales de manera ponderada, equilibrada y justa socialmente. No vamos a hacer recaer las cargas del ajuste sobre los más débiles. Vamos a hacer unos presupuestos realistas", insistió Montoro.
Finalmente, el ministro responsabilizó al PSOE de la "importante desviación" del déficit de 2011 con respecto a los objetivos marcados por el Plan de Estabilidad de España.
Antes de las palabras de Montoro, era el ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, quien confirmaba la aceptación del Gobierno del recorte adicional de 5.000 millones que exigía el lunes el Eurogrupo.
"España está absolutamente comprometida con el ajuste, está absolutamente comprometida con las reformas estructurales y evidentemente esa recomendación va a ser aceptada por parte del Gobierno español", dijo el titular de Economía a la entrada de la reunión del Ecofin de ayer.
De Guindos destacó que el Eurogrupo tuvo en cuenta "gran parte" de las alegaciones del Gobierno para relajar la meta de déficit para este año. "Se han aceptado los argumentos de España. La herencia recibida ha sido mucho peor, nos hemos desviado en 25.000 millones de euros, y eso lo reconoce el Eurogrupo", indicó, "y también reconoce que hay una situación de crecimiento económico más reducido que el que se había previsto".
También resaltó el ministro económico que "no ha habido ningún tipo de confrontación o enfrentamiento" entre el Gobierno y la UE sobre el objetivo de déficit, subrayando que mantiene "una magnífica relación personal" con el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker.
Como posteriormente confirmaba Montoro, De Guindos avanzaba igualmente el lunes que el recorte extra del déficit exigido a España no obligará a subir el IVA este año y que el ajuste adicional no tendrá "impacto significativo" sobre el crecimiento económico y el empleo.
"No lo prevé en este momento en absoluto en este año", dijo De Guindos al ser preguntado sobre si el Gobierno estudia un posible aumento del IVA en 2012 para lograr el ajuste extra. Interrogado por si el IVA se subirá entonces en los presupuestos de 2013, el ministro ha pedido que "no adelantemos acontecimientos".
Otro miembro del Gobierno que se pronunció sobre la decisión del Eurogrupo fue el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, quien aseguró que España ha ganado en la UE la batalla para relajar el objetivo de reducción del déficit para este 2012. El titular de Exteriores destacó que los países que comparten el euro han concedido a España el "máximo de flexibilidad posible al autorizar a nuestro país a dejar el déficit este año en el 5,3 por ciento del PIB, menos del 5,8 anunciado por el Gobierno, pero bastante más que el 4,4 por ciento fijado inicialmente.
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