Banderas insta a los políticos y al sector audiovisual a tomar medidas contra el paro

"Se deberían abrir las puertas para que nos sentemos todos y podamos ver cómo le metemos mano a esto para que no se nos caiga la casa y se quede la gente en el paro, que es lo que va a pasar", dijo Banderas en una rueda de prensa previa a la entrega del premio RTVA a la Trayectoria Profesional que le otorgó el Festival de Cine Europeo de Sevilla.
Tras afirmar que los recortes en el sector del cine parecen "irreversibles por las circunstancias económicas en el mundo", el actor andaluz subrayó que se trata de "un hoyo importante" y que aún no se ha llegado al final de la crisis, lo que "da miedo" porque "nos podemos dar un talegazo importante".

Banderas reconoció que no vive "el drama tanto" como la gran cantidad de gente que está "preocupada", y añadió que los recortes económicos se están produciendo en todo el mundo, por lo que la gente identifica la crisis es España con Zapatero, en Estados Unidos con Obama o en Francia con Sarkozy.

El actor y director lamentó que existan unos déficit económicos "absolutamente disparados", lo que provoca que no se "preste" dinero, y señaló que si persiste esta situación "nos vamos al garete".

Vestido con vaqueros, camisa de cuadros abierta y chaqueta de cuero marrón desgastada, el actor calificó de "bonito" el premio que ayer le entregó el director general de la Radio Televisión Andaluza (RTVA), Pablo Carrasco, galardón que también le pone en situación de "deuda".

Banderas, tras solventar con dosis de humor la insistencia de una reportera de televisión para entregarle un regalo, recordó que la productora en la que participa como empresario, Kandor Moons, con sede en Granada y que ha producido sus filmes "El lince perdido" y "La dama y la muerta", tiene a cien trabajadores.

El actor insistió en que existe "talento" en Andalucía dentro de la industria audiovisual, y expresó su deseo de que tenga "personalidad propia" fuera de la comunidad, tras lo cual matizó que le importa "un bledo" la rivalidad entre Málaga y Sevilla.

En la rueda de prensa, en la que preguntaron periodistas de la República Checa y de Marruecos además de españoles, el actor anunció que rodará íntegramente en Málaga su próximo proyecto, "Solo", una historia de un coronel de las fuerzas especiales españolas que pretende ser una reflexión sobre la soledad.

Además, se mostró confiado en lograr financiación en países árabes para otra película sobre Boabdil, un "humanista" que considera "mal tratado por la historia" y "denostado incluso por su propia gente".

Esta película nace de su "inquietud como andaluz y como heredero de una cultura que incluye al mundo árabe", según el actor, que ha hecho una semejanza de lo ocurrido con Boabdil, el último rey árabe en el Reino Nazarí, con la política de "bipolarización" ejercida por el ex presidente estadounidense George Bush, en la que por un lado estaba la cultura árabe y por otro "casi todas las demás".

Esta película "pretende ser épica y romántica" y debe permitir, ha indicado Banderas, una "reflexión serena sobre la relación que ha unido a nuestros pueblos, culturas y religiones durante tantísimo tiempo, de la que me siento heredero". puesta fue acogida positivamente por varios sindicatos.

Al gesto del líder de la CGT a "entrar en la negociación", Fillon respondió pidiendo al titular de Trabajo que de aquí a mañana se reúna con el resto de los sindicatos.
El objetivo es "recoger sus propuestas y ver cómo se puede hacer que se pare esta huelga lo antes posible e iniciar el ciclo de negociaciones en las empresas", dijo el primer ministro.

Sarkozy, que acompañado por Fillon y Bertrand, recibió a los directivos de la SNCF, RATP, EDF y GDF, abogó porque se abran "rápidamente" las negociaciones en las empresas sobre las medidas a favor de los trabajadores destinadas a acompañar la reforma.

Negociaciones sobre la penosidad, el empleo de los sénior, las primas, los fines de carrera, las pensiones complementarias, la "recompra" de años de estudio, y otros puntos, indicó el portavoz del Elíseo.

En su voluntad de reformar los regímenes especiales de pensiones, Sarkozy tiene el apoyo de la mayoría de los franceses, según los sondeos.

Pero, de enquistarse el conflicto, correría el peligro de que se coaliguen los descontentos -hay una huelga convocada en la función pública el 20 de noviembre y otra en los tribunales el 29-, en un contexto de desaprobación de su política económica, especialmente en materia de poder adquisitivo, que es la principal preocupación de sus conciudadanos.