El paro registrado se situó en junio por debajo de la cifra psicológica de los cuatro millones de personas por primera vez desde diciembre. Según los datos de los Servicios Públicos de Empleo conocidos ayer, el paro se situó en 3.982.368 personas tras reducirse en 83.834 desempleados en junio.
Además, junio fue el quinto mes consecutivo en el que se produjo un aumento de la afiliación, con 23.884 cotizantes más, con lo que la cifra media de afiliados al sistema alcanza los 17.785.782, lo que confirma la caída de la tasa interanual de adscritos al mismo. Desde el Gobierno, la vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega, afirmó que los datos ponen de manifiesto que se está frenando la destrucción de empleo y que progresivamente "irán registrándose mejores cifras", aunque recomendó "prudencia" y no "echar las campanas al vuelo".
La secretaria general de Empleo, Maravillas Rojo, valoró la bajada del paro porque, además de que disminuye por tercer mes consecutivo, la cifra supone el mayor descenso mensual de los últimos cinco años, y el mejor mes de junio desde 1997. El secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, destacó, asimismo, las "cifras significativas" de las nuevas altas en el sistema, ya que sólo el pasado jueves hubo 300.000 nuevas, provenientes del colectivo de demandantes de empleo.
Aunque el paro en junio subió entre el colectivo sin empleo anterior (en 915 personas) y en agricultura (174), bajó en la industria (15.402 parados menos), en construcción (21.253) y sobre todo en los servicios (48.268).
El paro masculino bajó en 58.891 hasta situar el número de desempleados en 1.978.301, y el femenino en 24.943 hasta las 2.004.067; también disminuyó entre los menores de 25 años (en 26.205), entre los mayores de esa edad (57.629) y entre los extranjeros (12.959). Además, bajó en todas las comunidades a excepción de Canarias que registró 57 parados más en junio.
En cuanto a los contratos se suscribieron 1,29 millones, de los que 98.754 fueron indefinidos (el 7,6% del total). La firma de 8.981 contratos indefinidos menos que hace un año ha provocado las críticas de los sindicatos hacia la reforma laboral aprobada por el Gobierno, ya que no ha solucionado la temporalidad, que es uno de sus objetivos.
Los sindicatos Comisiones Obreras (CCOO) y UGT coincidieron en que las bajadas de paro durante tres meses consecutivos ponen de manifiesto que es la actividad económica la que genera empleo.
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