El aparato biplaza, de color rojo, fue trasladado a Italia después de que las tropas del dictador Benito Mussolini ocuparan Etiopía en 1935, año de fabricación de la aeronave, para declarar ese territorio en 1936 como parte de la África Oriental Italiana.
El primer ministro etíope, Abiy Ahmed, confirmó la entrega del avión, bautizado como 'Tsehay', tras asistir el lunes en Roma a la cumbre Italia-África. «Hoy es un día de gran orgullo para los etíopes, ya que celebramos la entrega oficial de 'Tsehay' por parte del Gobierno italiano. Extiendo mi inmensa gratitud a la primera ministra Georgia Meloni por su apoyo durante el año pasado para facilitar su regreso», afirmó Abiy en su cuenta de la red social X este martes.
Abiy Ahmed
«'Tsehay' es el primer avión construido en Etiopía en 1935, gracias a los esfuerzos de colaboración del ingeniero alemán y piloto del emperador (etíope), Herr Ludwig Weber, y personas etíopes de esa época», agregó Abiy, que publicó fotos del aparato en el Museo Histórico Aeronáutico Militar de Vigna di Valle (centro de Italia). En ese museo, el mandatario y el ministro italiano de Defensa, Guido Crosetto, firmaron este martes el acuerdo de devolución del avión.
Según el Ministerio de Defensa italiano, la aeronave es «un ejemplar único utilizado por la Fuerza Aérea Imperial Etíope a principios de los años de 1930 para vuelos de enlace y entrenamiento».
El avión recibió su nombre en honor a la princesa Tsehay, hija del emperador Haile Selassie, que reinó de 1930 a 1974, cuando fue derrocado en un golpe de Estado
1 comentario
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Lo más curioso, es que mussolini no tenía ni intención ni razón para invadir a Etiopía. No tenía ni petróleo ni riquezas y se encontraba tan lejos de Italia que hacía su administración y control complicados y costosos. Mussolini invadió Etiopía para lograr el apoyo de los Savoia. El rey aceptó la marcha sobre Roma,años antes, y la toma por la fuerza del país por parte de los fascistas, sin pasar por las urnas, a cambio de que estos les hicieran emperador. La conquista de Etiopía solo tenía como finalidad cumplir con lo prometido. Esta actitud fue vivida por los italianos como un acto de extrema arrogancia y demostración de un ego desmesurado por parte del rey, que no es de extrañar la derrota de la monarquía en el referéndum que marcó el paso de Italia a un sistema republicano.