Según publica The Telegraph, la adolescente fue abordada la primera vez por un individuo que no ha sido identificado en la estación de tren de Witton, cercana al campo de fútbol del Aston Villa, el pasado martes.
Cuando pudo salir del lugar, paró a un coche para pedir ayuda. Fue en el interior del vehículo donde sufrió la segunda violación, según apuntan los investigadores, que han establecido un fuerte dispositivo para dar con los agresores, y en el que se busca a testigos que puedan colaborar en la tarea.
El inspector jefe de la Policía de Transporte Británica habló de estos hechos como «una terrible experiencia para esta joven. Tenemos a oficiales especialmente entrenados trabajando en el caso, examinando las señales de cámaras disponibles, en un gran esfuerzo por identificar a los delincuentes y llevarlos ante la justicia».
Por este motivo, y dada la alarma social que ha generado el caso, han pedido la colaboración ciudadana de todas las personas que pudieran haber visto algo.
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