El aviso de la DGT a los conductores mayores en España: «no dejéis de hacerlo drásticamente»

La entidad lanza un manual para orientar sobre el debate de la conducción en ancianos

La guía proponer enfocar esta situación con paciencia y comprensión. | Eye Em

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La conducción en personas mayores es un tema de creciente relevancia debido al envejecimiento poblacional. Abordar cómo se modifica la capacidad de conducir con la edad puede ser un tema espinoso dentro de las familias. La nueva guía publicada por la Dirección General de Tráfico (DGT) ofrece un enfoque comprensivo y respetuoso para abordar este desafío de forma constructiva, evitando la prohibición abrupta del uso de vehículos por parte de conductores de mayor edad.

Una estrategia pensada para la seguridad vial

El documento, denominado 'Guía de Consejo Sanitario Vial para el conductor mayor y su entorno próximo', se inscribe dentro de la Estrategia de Seguridad Vial para Mayores que está desarrollando la DGT. Su objetivo es facilitar herramientas a familias y allegados para que puedan abordar de manera efectiva y sin conflictos la transición de la conducción segura en personas mayores. La guía hace hincapié en que la edad, por sí sola, no es un factor determinante de las capacidades de conducción, sino que son las condiciones físicas y mentales del individuo las que juegan un papel crucial.

La propuesta de la guía incluye un modelo de intervención preventiva, con la realización de dos cuestionarios especializados. Estos cuestionarios, dirigidos tanto al conductor mayor como a sus familiares, exploran áreas cognitivas, emocionales y físicas, así como la propia habilidad de conducción. Algunas de las preguntas clave permiten evaluar desde la memoria hasta la capacidad de respuesta a estímulos, pasando por la evaluación de las emociones.

Una aproximación escalonada y consensuada

La DGT recomienda a las familias llevar a cabo un enfoque planificado y consensuado, donde el conductor mayor no se sienta marginado ni faltado al respeto. Esta estrategia propone evitar reacciones impulsivas como arrebatar las llaves del coche de manera inesperada, las cuales pueden generar tensiones y malentendidos. En lugar de eso, se aconseja un planteamiento más inclusivo y dialogante, donde se compartan inquietudes y se elaboren planes de acción conjuntos.

Dentro de las alternativas posibles, la guía sugiere diversas restricciones en el uso del vehículo por parte de las personas mayores, basadas en evaluaciones realistas y objetivas de sus capacidades. Estas podrían incluir la limitación de desplazamientos, tanto en distancia como en condiciones de luz del día, o un uso más continuado de transporte público. En lo posible, se debe buscar el asesoramiento de profesionales para validar estas decisiones y reforzar la confianza en el proceso de transición.