Si eres dueño de un gato, es probable que hayas observado un comportamiento peculiar: tu felino se acerca a un objeto, deja la boca entreabierta y huele, mostrando una expresión que puede parecer de desconcierto o sorpresa. Pero, ¿Cuál es la razón detrás de esta curiosa reacción? A continuación te arrojamos un poco de luz sobre el asunto.
Nuestros felinos, como muchos otros animales, están dotados de un órgano especializado llamado órgano de Jacobson o órgano vomeronasal. Ubicado en el paladar superior, justo detrás de los dientes frontales, este órgano está conectado a la cavidad nasal. Su función principal es detectar feromonas, las sustancias químicas que transmiten información entre individuos de la misma especie.
Cuando un gato huele algo y luego abre la boca, está utilizando una técnica llamada flehmen. Al hacer esto, el felino facilita que las moléculas olfativas entren en contacto con el órgano de Jacobson. Esencialmente, está tratando de 'saborear' el aroma, procesando la información a un nivel mucho más profundo y específico que un simple olfateo.
La comunicación a través de las feromonas
Desempeñan un papel crucial en el comportamiento y la comunicación de los gatos. Estas señales químicas pueden indicar una amplia variedad de datos, desde el estado reproductivo hasta el nivel de agresión o la demarcación territorial. Por ejemplo, es común que los gatos rocen su cabeza contra objetos o personas para marcar con sus feromonas, indicando que ese territorio o individuo es 'de su propiedad'.
Al 'saborear' los aromas con el órgano de Jacobson, un gato puede recibir información detallada sobre otros gatos en su entorno. Por ejemplo, si un gato macho detecta las feromonas de una hembra en celo, su respuesta será diferente que si detecta las de otro macho.
Una ventana al mundo emocional de los gatos
Lo que este comportamiento revela es la riqueza del mundo sensorial y emocional de los gatos. Estos animales, a menudo considerados esquivos o misteriosos, tienen formas sofisticadas de procesar y responder a su entorno. Al dejar la boca abierta después de oler, los gatos están, en cierto modo, mostrando su vulnerabilidad. Están tomando un momento para procesar la información, sin estar completamente alerta a su entorno. Por lo tanto, es importante no perturbar a un gato cuando muestra este comportamiento, ya que podría sentirse amenazado.
Los gatos han sido compañeros del ser humano durante miles de años, y aún así, todavía hay muchos aspectos de su comportamiento y biología que nos sorprenden y fascinan. El acto de abrir la boca después de oler es solo un ejemplo de las múltiples formas en que los gatos interactúan y comprenden su entorno. Para sus dueños, comprender este comportamiento puede enriquecer la relación que tienen con ellos, ofreciendo una perspectiva más profunda sobre cómo sienten y perciben el mundo a su alrededor. Además, nos recuerda la importancia de observar y aprender de nuestros grandes amigos, ya que a menudo tienen formas únicas y maravillosas de interactuar con el mundo que nos rodea.
Por eso la próxima vez que veas a tu gato con la boca abierta después de oler algo, tómate un momento para apreciar la complejidad y profundidad de su mundo sensorial. Es un recordatorio de que, aunque compartimos nuestras vidas con ellos, los gatos tienen su propia perspectiva y formas únicas de experimentar el mundo.
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Interessant. Gràcies.