En principio los perros se adaptan muy bien al entorno en el que viven, gracias al pelo que tienen ellos mismos pueden graduar su temperatura corporal, aunque bien es cierto que siempre hay excepciones a tener en cuenta, que a continuación detallamos.
1. Los que no tienen pelo o son de pelo corto. Hay algunos que debido a una enfermedad u operación, o que la raza es de esta manera (el galgo por ejemplo), necesitan en invierno protegerse más del frío y de la lluvia.
2. La edad. Tanto cuando son cachorros como cuando tienen una cierta edad y ya son mayores les cuesta más regular su temperatura y un abrigo les ayuda a que estén más calentitos cuando salen a pasear con nosotros.
3. Las razas más pequeñas o llamadas 'toy'. Los perros de este tamaño sufren más a las bajas temperaturas o a cambios bruscos de tiempo debido a que pierden el calor de manera más rápida que los grandes.
Los perros con el pelo largo, como el samoyedo o san bernardo entre otros ya están preparados para el frío y no necesitan utilizar nada en este sentido. Antes de comprar uno asegúrate si de verdad lo va a necesitar o es simplemente por capricho.
Consejos para escoger un abrigo
Antes que la estética prima la funcionalidad y sobre todo la comodidad del can, hay que dejarse asesorar por profesionales que nos aconsejen ya que tienen experiencia. Tiene que prevenir cualquier roce o fricción con su cuerpo cuando camina, si puede ser de algodón mejor.
Tener en cuenta escoger uno que sea también chubasquero, cuando llueve el agua puede calar dentro de la prenda que lleve, hacer que el perro se moje y se ponga enfermo. El abrigo debe utilizarse al salir de casa, dentro no es necesario que lo lleve puesto, si que es prioritario tener una cama que sea cómoda y si puede ser dentro del hogar mejor, en caso de que esté fuera tiene que estar en una caseta resguardada del viento, la lluvia y el frio.
Indicios de que tu perro tiene frío
Muchas veces al salir de casa y coger la correa tu perro se esconde. Si es así, cuidado. Si te da indicios de que quiere quedarse en tu domicilio y se queda en la puerta es porque tu perro tiene frío. Si insistes en que te hago caso a la hora de dar un paseo y en otras estaciones como en primavera o otoño no lo hace es porque es una mascota que no aguanta las bajas temperaturas. Si tiembla constantemente, va mucho más lento caminando y en ocasiones se para durante el trayecto, según cuentan los especialistas, son indicios de que tu peludo tiene frío. Y no solo eso, también es muy importante observar su hocico. Si la tiene seca y deshidratada eso es una prueba más de que algo no anda bien. Si aún así quieres tener una opinión de un profesional desplázate a tu veterinario de confianza para asegurarte de ello y así poner remedio.
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