26/11/17 22:00
QUE por la preocupante falta de plazas en los vuelos interislas, el recién nombrado caballero del Santo Sepulcro de Jerusalén, Alberto Gil, recurriera a su instructor de vuelo, Enrique Bartsch, y a su compañero de pilotaje del Aeroclub, el doctor Bettiol, para llegar a tiempo en avioneta a Palma a la toma de posesión del obispo Sebastià Taltavull.