Que la alerta de rissaga en el puerto de Ciutadella, en un día de cielo gris y encapotado como el de ayer, casi no altere la actividad propia de la zona portuaria. La oscilación máxima de sesenta centímetros no impidió que se deslizaran al mar algunas embarcaciones desde la rampa de Sa Colársega, en cuyos muelles apenas se ven barcas amarradas.
Que en los últimos días se hayan iniciado las obras de construcción de dos nuevas estaciones low cost para el suministro de combustible en la zona del polígono industrial de Maó.
Que un pasajero haya ganado un juicio contra una compañía aérea que le cobró 30 euros de gastos de gestión porque el nombre de su mujer no estaba escrito correctamente en el billete.
Que el PSOE de Eivissa critique a Podemos por el tema de la ecotasa, al considerar que el partido morado tiene «un discurso diferente» según la Isla en que haga declaraciones.
