La política debería plantearse como una actividad pública para mejorar la vida de los ciudadanos. Si un político no tiene los votos suficientes para desarrollar su gestión, debe utilizar los instrumentos políticos a su alcance para cambiar la situación. Lo contrario es perjudicar a los ciudadanos, aunque me temo que los profesionales de la política viven en su propio mundo y en demasiadas ocasiones demuestran que no están en contacto con los problemas de los ciudadanos.
Prohens está ahora ante un dilema. Si no aprueba los presupuestos tiene, en primer lugar, la opción de presentar una cuestión de confianza, como prevé el Estatut. Si la cuestión de confianza fracasase, debería convocar elecciones y buscar una nueva mayoría. De la misma manera que Prohens debe buscar los 30 votos necesarios para gobernar, estaría bien saber si Vox quiere que se mantengan las políticas de la izquierda o, por el contrario, prefiere pactar con una formación más afín ideológicamente para colar propuestas con sentido común. Sin nuevos presupuestos difícilmente se podrán aplicar nuevas políticas.
Da la sensación de que a Vox le importa bastante el interés general porque ha visto que su propuesta de la libre elección de lengua en los colegios de Balears ha tenido una respuesta irrelevante. Por lo tanto, lo que busca es tener un perfil propio de cara a las próximas elecciones porque se ha demostrado que no le interesa gestionar, lo cual agradecen todos los ciudadanos moderados y con sentido común.
¿Y qué pasaría si se convocaran elecciones en Balears el año que viene? En primer lugar, es de suponer que Armengol renunciaría a la presidencia del Congreso de los Diputados para ser la candidata socialista, que es algo que ella mismo ha dicho públicamente en distintas ocasiones. Pensar que Negueruela o Cladera puedan ser los candidatos debería preocupar al votante socialista más optimista. Prohens sabe que puede arañar votos gracias a la crisis del PSOE, que no pasa por sus mejores momentos por los escándalos, pero también debe ser consciente (me imagino) que Vox no perderá demasiados apoyos. Y costaría entender repetir elecciones para que todo siga igual. Aun así, la política es arriesgarse y no tomar medidas sin presupuestos no tiene demasiada lógica.